Gian Lorenzo Bernini y sus contemporáneos en Roma transformaron el retrato de busto en una forma de arte innovadora. Con gran pericia, estos artistas fueron capaces de imprimir a la piedra o al mármol la presencia realmente viva y la personalidad del retratado, casi siempre personajes poderosos que deseaban verse inmortalizados con ostentación y heroicidad de cara a la posteridad.

Bernini aparece frecuentemente acreditado como el inventor del barroco, un estilo artístico nacido en la Europa del siglo XVII que se caracteriza por conectar con la sensibilidad del espectador mediante el virtuosismo y el realismo, llegando a la mente a través de la emoción, más que a través de la razón.

La palabra "barroca" fue acuñada en el siglo XVIII, y procede de un término portugués que se utiliza para definir una perla de tamaño irregular, aludiendo así a las formas torcidas y caprichosas del barroco, corriente artística que también se distingue por el histrionismo de sus temas y escenas, las actitudes teatrales de los personajes, el movimiento y la exuberancia.

El soberbio busto de Constanza Bonarelli (F1), labrado entre los años 1636 y 1638 por el maestro italiano Gian Lorenzo Bernini, supone la quintaesencia de la energía y el dinamismo del barroco, famoso igualmente por capturar una acción efímera en un instante. Dicho busto constituye también el culmen experimental del autor en sus retratos de busto, los cuales han sido convertidos por Bernini en piezas informales, inmediatas y dotadas de gran realismo.

A medida que Bernini se vio cada vez más implicado en proyectos arquitectónicos de envergadura -caso de la ornamentación para la Basílica de San Pedro, en El Vaticano-, sus retratos de busto se hicieron más aislados y, al final, acabaron reservándose para los clientes más poderosos, caso del papa Clemente X (F2) o la familia romana Barberini, los mecenas más importantes de la Roma del barroco.

Una interesante exposición en el Getty Center de Los Ángeles, inaugurada el pasado 5 de agosto, nos ofrece, a través de 60 esculturas, pinturas y dibujos realizados por Bernini y sus coetáneos, su ejemplar labor realizada en los retratos de busto. Con el título Bernini and the Birth of Baroque Portrait Sculpture, ha sido organizada con la colaboración de la National Gallery de Ottawa. Puede visitarse hasta el 26 de Octubre de 2008.