LA CHACHA DE JEREZ DE LA FRONTERA
Antonio de la Rosa Mateos (20/02/2010)
Hace más de medio siglo que dejó de procesionar en Jerez de la Frontera un paso alegórico conocido popularmente como La Chacha, que cada Viernes Santo desfilaba con la Hermandad del Santo Entierro y Nuestra Señora de la Piedad. Su verdadero nombre era el de paso alegórico del Triunfo de la Cruz sobre la Muerte, donde se apreciaba, de manera lúgubre y explícita, la figura de la muerte, representada por un esqueleto compungido por la derrota que le impone la Cruz. Santiago Sebastián, en su publicación "Contrarreforma y Barroco", explica que la representación de la calavera como la muerte en España proviene de finales del periodo gótico. En esta época, aparece en las composiciones de "vanitas" y sobre todo en las tumbas para recordar a los vivos la brevedad de la vida, la incertidumbre del futuro y la inanidad de lo humano. El motivo del esqueleto era más familiar y popular. En los archivos de la Hermandad del Calvario aparece en un inventario, fechado en el año 1728, el esqueleto, y en otro del año 1752 la guadaña de plata. No sabemos a ciencia cierta desde cuando procesionaba en el cortejo del Santo Entierro la tarde del Viernes Santo, aunque Bartolomé Gutiérrez cita en "Año Xericience", fechado en el año 1755, un paso de la Cruz, en el cual dice:
También podemos ver que, después de la desaparición de las Hermandades en 1771, aparece en un inventario de 1813 en el Archivo Municipal en lo referente a la Cofradía del Santo Entierro como ésta disponía de tres pasos. Durante los dos siglos en los que procesionó, se ha dispuesto en diferentes formas. Desde sus inicios hasta finales de los 30 del pasado siglo XX, el esqueleto iba llevado en una pequeña parihuela cargada por un número reducido de cargadores con horquillas, vestidos con túnicas y bacalao negro, muy parecidos a los del jerezano Cristo de la Expiración. En un reglamento de cuadrillero y hermanos cargadores de la Hermandad del Calvario, fechado en el año 1926, se señala: "Se compondrá de catorce hermanos cargadores el paso de la Virgen y de diez cargadores el paso de la Cruz". En el año 1937, el periódico "Ayer", con fecha de 18 de Marzo, informa que la Hermandad de la Piedad ha realizado un paso para el Cristo de la Viga, obra del maestro carpintero de Pedro Domecq señor Asencio. A partir del año 1939, la Hermandad de la Piedad lo utilizará también el Viernes Santo como paso para La Chacha. Era de tamaño reducido, para 25 costaleros, de tableros de madera oscurecida, muy simple, que fue utilizado en sus primeros años por la Hermandad de la Defensión (1958-1962), en 1959 por la de la Buena Muerte y en 1960 por la de Santa Marta. El esqueleto de la muerte sentado sobre una roca está realizado en marfil y llevaba apoyada la cabeza sobre su mano derecha, sosteniendo sobre la izquierda la guadaña de plata. Detrás de ella, la Cruz que tiene colgada la Sábana Santa, estando apoyadas sobre ella las dos escaleras empleadas por los Santos Varones para el Descendimiento de Cristo. Dicha Cruz se conserva actualmente en la Sacristía de la Capilla del Calvario. Además, el paso de La Chacha ha llevado a veces diversos signos alegóricos como un reloj de arena, el martillo y las tenazas o una bola del mundo. En el cortejo siempre figuró como primer paso de la Cofradía del Santo Entierro la tarde del Viernes Santo, precedido de un Guión del Santo Sepulcro, presidencia de Hermanos Mayores y un acompañamiento en cada una de las esquinas del paso. En la década de 1940 era muy frecuente que fuese acompañado por banda de tambores y cornetas como las del Hospicio Provincial, de la Legión, del Hogar de la Purísima Concepción o en su último año en 1955, por la banda de Artillería. También tenemos constancia por algunas fotografías de las primeras décadas del XX que alguna vez procesionó el esqueleto a los pies del Cristo del Calvario. Como conclusión, si los hermanos del Santo Entierro aprueban en cabildo a finales de Febrero volver a sacar el paso del Triunfo de la Cruz, Jerez de la Frontera recuperaría una de las tradiciones más antiguas, lo cual sería un gran acierto. La popularmente conocida como La Chacha, o en otros lugares como "La Canina" o "La Narcisa", se puede contemplar en otras ciudades españolas como Sevilla, Alcalá de Guadaíra (Sevilla), Aracena (Huelva), Alcalá del Río (Sevilla), Urduna (Bizkaia), Orihuela (Alicante) o Jerez de los Caballeros (Badajoz). |
Nota de La Hornacina: Antonio de la Rosa Mateos es miembro del Centro de Estudios Jerezano.
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