DOSSIER... MUESTRA DE ARTE COFRADE EN HUELVA 2009




Interesantes figuras de los profetas Jeremías y Ezequiel (2005-2006), labradas en madera de caoba por el sevillano Juan Alberto Pérez Rojas, el escultor e imaginero que más presencia ha tenido en esta última edición de la muestra onubense. Miden 60 cm y forman parte, junto con otras similares de Daniel e Isaías, también presentes en la exposición, de la decoración escultórica de las andas procesionales del Cristo de la Sangre, de Ronda (Málaga).





En la imagen de la izquierda, efigie de la Inmaculada Concepción que centra el Simpecado de la Cofradía de la Vera Cruz de Huelva. Es una de las creaciones de pequeño formato menos conocidas del onubense Sebastián Santos, quien realizó un excelente trabajo de talla, policromía y estofado. Fue restaurada en 2004 por el imaginero sevillano Luis Álvarez Duarte. Los bordados del Simpecado, en hilo y hojuela de plata, fueron confeccionados en 1954 por Guillermo Carrasquilla. La orfebrería, cincelada por Manuel Seco Velasco, fue reparada por Hijos de Juan Fernández, también en el año 2004. A la derecha, imagen de Niño Jesús Triunfante, obra anónima del siglo XVIII perteneciente a una colección particular de la localidad sevillana de Carmona. Erróneamente relacionado con el archidonés Juan de Astorga, su fisonomía se encuadra mejor dentro del estilo de José Montes de Oca desarrollado durante la centuria anterior.





A la izquierda, imagen de San Judas Tadeo que procesiona en la trasera del canasto del paso de la Cofradía del Cristo del Perdón de Huelva. Es obra de pequeño formato, tallada en madera de cedro policromada y estofada en oro fino por el imaginero onubense David Valenciano Larios (2006). A su derecha, Molduras y Dragones del paso de misterio de la Cofradía del Prendimiento de Huelva, obra de los hispalenses Talleres Pineda (2000-2004). Cuatro altorrelieves muestran escenas vaticinadas en los textos bíblicos por el Profeta Elías: la Prefiguración de la Oración de Jesús en el Huerto, la Prefiguración de la Resurrección del Lázaro por Jesús, la Prefiguración de la Venida del Espíritu Santo en Pentecostés y la Prefiguración de la Ascensión de Jesús en Cuerpo y Alma a los Cielos. Todos ellos han sido labrados por el sevillano Rubén Fernández Parra, presentándose en La Hornacina en 2008.





Magnífica urna procesional de la Cofradía del Santo Entierro del municipio onubense de Trigueros, de autor anónimo y fechada en el año 1783. Realizada en madera dorada, es de estilo rocalla y se adorna con ocho pequeños ángeles que sostienen en sus manos elementos relativos a la Pasión y Muerte de Jesús. El conjunto se alumbra con cuatro candelabros de guardabrisas, de cinco luces cada uno. Su tapa se encuentra coronada por una imagen alegórica de la Fe.





En la imagen de la izquierda, la Virgen del Rocío situada en la Gloria del techo del paso de palio de la Virgen de la Paz, titular mariana de la Cofradía del Cristo de la Vera Cruz de Moguer (Huelva). Es obra del imaginero cordobés Manuel Luque Bonillo y fue presentada en La Hornacina el pasado año 2008. A la derecha, Dolorosa de pequeño formato, labrada en terracota policromada para vestir por el joven escultor e imaginero onubense, afincado en Sevilla, José Ángel Ponce. Ha sido la sexta pieza mejor valorada por el público dentro de las presentadas en La Hornacina durante 2008.





A la izquierda, Ecce Homo de busto, pertececiente a una colección particular de Carmona (Sevilla). Es pieza anónima del siglo XVIII inspirada en los famosos modelos granadinos sobre el tema, creados por los Hermanos García. En la imagen de la derecha, Dolorosa anónima de vestir, perteneciente a la escuela andaluza de finales del XVII. Ha sido presentada en esta muestra por el establecimiento Antiguedades Montano Piranesi, de Sevilla. Mide 147 cm.





A la izquierda, imágenes del inconcluso paso de misterio de la Cofradía del Cristo de la Sentencia en su Presentación al Pueblo y la Virgen de la Salud de Huelva. El Romano y Barrabás son de Manuel Madroñal Isorna (2007-2008), y fueron presentados en La Hornacina el pasado año, mientras que Pilatos fue labrado por David Valenciano Larios en 2005. A la derecha, busto que representa a Poncio Pilato. Es obra modelada en barro cocido, patinado y dorado, por el joven onubense José Miguel Sánchez Rodríguez (2008), discípulo del afamado imaginero cordobés Antonio Bernal Redondo.





Conjunto de figuras de misterio del paso procesional de Nuestro Padre Jesús de las Cadenas, de la Cofradía de Los Judíos de Huelva: un sayón que ha azotado a Cristo, un soldado romano en actitud burlesca y un miembro del sanedrín que presencia la escena. Las tres recrean actualmente el pasaje del Escarnio y formaron parte de los dos pasos de misterio de la Cofradía del Valle de Sevilla. Todas se atribuyen al sevillano Jerónimo Roldán (primer tercio del siglo XVIII), siendo retocadas en el taller de Emilio Pizarro de la Cruz y sometidas a una reciente labor de limpieza, conservación y leves reparaciones por Ana Beltrán (2005). Las imágenes pertececen a la hermandad onubense desde el año 1910.





En la imagen de la izquierda, detalle de la interesante estatuilla en madera de la Inmaculada Concepción realizada por la escultora utrerana Encarnación Hurtado Molina para el nuevo Simpecado de la Cofradía del Santo Entierro de Huelva. Fue presentada en La Hornacina a finales de 2008. A la derecha, otra pequeña Inmaculada para un Simpecado, en esta ocasión el de la Cofradía de la Esperanza de Huelva. Es una pieza con carnes de marfil labradas por Doblas y ropa confeccionada por las Madres Oblatas de la capital onubense (1988), autoras también de los bordados de la insignia.





El Santo Ángel de la Guarda custodiando a un niño y San Miguel venciendo al dragón son dos de los cuatro arcángeles que figuran en las capillas del canasto del paso de misterio de la Cofradía de la Entrada Triunfal de Jesús en Jerusalén de Huelva. Las imágenes son obra del escultor e imaginero ayamontino Antonio León Ortega (1958).





Otras dos obras de Juan Alberto Pérez Rojas, artista de Sevilla: un modelo en poliéster con aguada de color de Cristo Atado a la Columna, de gran dignidad y resignación ante el tormento, con las manos atadas sobre la espalda a una columna amarmolada de tipología baja, y la Dolorosa para vestir que les mostramos en La Hornacina el pasado 12 de diciembre de 2008. La imagen, de serena aflicción y manos fuertemente entrelazadas en actitud implorante, fue presentada en la última edición de la Bienal de Imaginería de la localidad onubense de Higuera de la Sierra, donde obtuvo la tercera clasificación.