Se trata de dos de las últimas obras pictóricas, de temática sacra, que han salido del estudio del restaurador y pintor sevillano Antonio Díaz Arnido. Ambas han sido realizadas para colecciones privadas.

La primera de ellas, de tipo panorámico, pintada en pequeño formato y al óleo sobre tabla, representa una muy personal visión del busto del Nazareno de Priego de Córdoba sobre fondo blanco. El Cristo es una talla atribuida con fundamento al artista alcalaíno Pablo de Rojas (hacia 1592).

La segunda, también de pequeño formato (55 x 47 cm) y al óleo sobre tabla, se titula Descendimiento y posee parecidos caracteres morfológicos y cromáticos. Hablamos de un simulacro de la hechura cristífera que procesiona la Hermandad de la Quinta Angustia de Sevilla, obra de Pedro Roldán (hacia 1659).