Inmaculada Concepción modelada por el artista hispalense Borja Peña Barranco en terracota policromada (mide 60 cm de altura el conjunto) sobre peana de madera negra para una colección particular.

El escultor nos comenta que este encargo de escultura sacra iba a tratar sobre la iconografía del Niño Dios, pero el cliente, al ver en su taller la Inmaculada basada en los modelos de Pedro de Mena, una obra presentada en La Hornacina el pasado 17 de marzo, cambió de idea y le dio total libertad para realizar esta nueva efigie inmaculista, siendo la única petición que los ropajes tuvieran un mayor movimiento que la anterior.

Para ello el imaginero decidió buscar la inspiración en los lienzos del Barroco, y aunque en un principio tenía en mente los famosos modelos iconográficos pintados en Sevilla por Murillo, finalmente fue el flamenco Rubens con su Inmaculada del Museo del Prado la que le inspiró su composición.

La escultura adapta con total libertad el prototipo pictórico. El autor ha tratado de modelar con frescura el barro en ropajes y cabellos, prescindir de toda ornamentación y darle todo el protagonismo al modelado.