El pasado 18 de febrero tuvo lugar el acto de presentación y bendición de la nueva dolorosa con la advocación de Mayor Dolor que va con destino a la Hermandad de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder y Nuestra Señora del Mayor Dolor de la localidad granadina de Motril, que procesiona en la madrugada del Jueves Santo.

Dicha hermandad de penitencia sustituye la imagen de la dolorosa, obra anónima del siglo XVIII, por una de nueva factura porque la anterior no cumplía los requisitos artísticos necesarios.

La dolorosa de Israel Cornejo muestra una mujer de rasgos algo más maduros de lo habituales en su obra, además de un fuerte giro de la cabeza hacia la derecha y acusado rictus de dolor en cejas, labios y párpados caídos e hinchados por el llanto, todo ello en alusión a su título de Mayor Dolor. Posee también la mirada baja y los ojos policromados sobre cristal a mano, en tonos marrones. También son de cristal las siete lágrimas en referencia a los Siete Dolores de la Virgen. Como suele hacer el artista últimamente, la garganta y la campanilla están talladas en el interior de la boca, al igual que los dientes superiores e inferiores y la lengua. La altura total es de 170 cm. Las manos están abiertas en actitud coloquial, y el pelo tallado y recogido en la nuca.

De momento, esta imagen mariana irá sobre el paso de misterio de la corporación, representando el encuentro en la calle de la Amargura junto con el Nazareno del Gran Poder, obra de talla completa realizada por Domingo Sánchez Mesa, un Cirineo de Miguel Zúñiga Navarro y un soldado romano de Manuel Madroñal Isorna.

A las doce de la noche del Jueves Santo será la primera vez que esta nueva talla, realizada en madera de cedro tallada y policromada al óleo, cruce la ciudad costera de Motril acompañando al Señor del Gran Poder, siendo un punto de especial interés durante la procesión el angosto callejón de las Monjas.