Se trata de una imagen de Jesús Resucitado para un grupo de fieles con sede en la Iglesia Parroquial de Santa María la Mayor de Torreperogil (Jaén). Es una obra de gran expresividad corpórea con la que el artista plasma el instante en que Cristo se dispone a subir junto al Padre una vez traspasada la losa del sepulcro.

Malo Guerrero muestra a un Varón que, pese a su milagrosa conversión ultraterrena, exhibe un fuerte estudio anatómico. La fusión entre espiritualidad y poderosa musculatura se manifiesta también en la inestable posición de una figura que empieza a elevarse agitada sobre nubes. Las claras y brillantes carnes parecen aludir a la luz que, según algunos autores, irradió Cristo en los triunfantes momentos de la Resurrección.

Todos los elementos del simulacro desprenden sensación de ascenso, incluidos los brazos alzados y los cabellos encrespados que van despegándose suavemente del semblante. Posiblemente se incorpore el próximo año 2013 a la agenda de procesiones de la Semana Santa de Torreperogil, localidad natal del joven escultor.