NUEVA OBRA DE ANTONIO JOSÉ MARTÍNEZ RODRÍGUEZ
03/03/2011
Hablamos de una pieza que supone una mezcla del desgarro dramático de la Virgen de los Dolores de la Iglesia del Salvador y San Nicolás (Madrid), con la que guarda muchos puntos en común, y la dulzura expresiva de la Virgen de las Angustias de Toledo, ambas labradas también por este artista jiennense afincado en Madrid. La cabeza de la Dolorosa, adquirida por la Hermandad de la Redención de León, se inclina sobremanera hacia el lado derecho, al tiempo que extiende el brazo al espectador para mostrarle los clavos de la Crucifixión. El rostro, dotado de cierta madurez, presenta un moderado rictus de dolor. La sensación de angustia se transmite a través del crispado entrecejo, las dos lágrimas de cristal que corren por sus mejillas, y la boca, perfectamente anatomizada y entreabierta en señal de lamentación. Las severas ropas y la ausencia de preseas subrayan la nota de patetismo en un simulacro que, como hemos apuntado, constituye prácticamente una revisión algo suavizada del gesto y la composición de la Dolorosa de Madrid. La mano izquierda está en actitud de recoger el manto que cruza en diagonal su delantera. Si pulsan sobre el icono que da paso a la noticia, podrán ver más fotografías de uno de los últimos trabajos del escultor e imaginero Antonio José Martínez Rodríguez, cuyo taller se halla en el nº 16 de la Calle Segovia de Madrid. Muy pronto les ofreceremos más información sobre otras de sus últimas creaciones sacras, entre las que se encuentra una nueva representación de Cristo Crucificado que se encuentra actualmente acabando. |
www.lahornacina.com