La última Virgen dolorosa del escultor de Morón de la Frontera (Sevilla) ha sido tallada en madera de cedro a tamaño natural y policromada al óleo. Su advocación es María Santísima de la Salud y su destino la localidad de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz). Esta imagen mariana de candelero para vestir es una obra muy especial para el artista, ya que ha sido presentada a sus comitentes pocos días antes del fallecimiento de su padre.

En su ejecución han colaborado Juan José Fernández Almagro y Antonio Jesús Ángel Verdugo, oficiales del estudio-taller de Martín Nieto. Para el amplio reportaje gráfico de Jorge Cabrera que acompaña la noticia han colaborado David Toro, quien ha vestido la Dolorosa, y la Agrupación Parroquial del Soberano de Morón -que ha cedido las vestimentas y la corona-, así como sus priostes Germán y Encarna.

Entre los proyectos que se encuentra llevando a cabo Manuel Martín Nieto se encuentra la talla en madera de cedro a tamaño natural del "Cristo de la Sentencia" para la Asociación Parroquial de Nuestro Padre Jesús de la Sentencia y María Santísima de la Misericordia (Parroquia de San Antonio Abad en Mahón, Menorca), firmada en diciembre de 2019 y paralizada durante un tiempo debido a la crisis sanitaria.

Además, prepara ya las nuevas figuras de misterio para la Venerable Hermandad y Cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Humildad, Nuestra Señora de la Victoria, Nuestra Señora de la Aurora y San Juan Evangelista del municipio sevillano de Lebrija. Los bocetos a dibujo de tan ambicioso encargo han sido realizados por el pintor hispalense Manuel Peña Suárez, colaborador habitual de Martín Nieto, según una idea del imaginero.