Se trata de dos cabezas aladas de querubines que las hermanas Esther y Laura Moreno han tallado en madera de cedro para formar parte de un techo bordado que ya se encuentra ubicado en el baldaquino de la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno venerada en la Basílica de Santa María de los Reales Alcázares de Úbeda (Jaén). Ambas llevan policromía al óleo y las alas doradas en pan de oro fino y estofadas.

El techo que alberga este nuevo trabajo de talla, que no ha visto la luz hasta ahora por la pandemia, ha sido donado por la familia Jiménez Expósito a la cofradía ubetense del Nazareno, cuyo titular, tallado en 1940 por el escultor jiennense Jacinto Higueras Fuentes, está siendo actualmente intervenido en la propia basílica por Arte y Restauraciones Moreno para mejorar el sistema de anclaje de la cabeza a las potencias.

El diseño y los bordados en oro del nuevo techo de terciopelo morado han sido confeccionados por Ana Expósito López. Junto al anagrama central con motivos cristíferos (JHS, cruz, alfa y omega), rodeado de rayos, estrellas y motivos florales, destacan los querubines sobre una cinta con la leyenda "Que al nombre de Jesús toda rodilla se doble". El conjunto ya está en su ubicación y puede ser contemplado por todo aquel que lo desee.

Otra obra de Arte y Restauraciones Moreno cuya presentación fue retrasada por la pandemia fue esta copia de la popular imagen de la Virgen de la Cabeza de Andújar (imágenes inferiores) para la cofradía filial de la pedanía granadina de Olivares (Moclín). La imagen ha sido tallada en madera de cedro real, policromada al óleo y con estofados realizados sobre el dorado aplicado con panes de oro fino de 23 quilates.