Imagen de la Virgen dolorosa con la advocación de Nuestra Señora de las Angustias, tallada en madera de cedro con una altura de 170 cm, y policromada al óleo con acabado realista y terminación mate. Lleva dientes protésicos, pestañas superiores de pelo natural y cuatro lágrimas de cristal fundido.

La obra tiene manos talladas independientemente, pero con la particularidad de que se pueden colocar tanto juntas como separadas para componer variadas estampas.

Se trata de un encargo destinado a la devoción particular de un artista de televisión de la provincia peninsular de Bataán, en Filipinas, donde hay un buen número de católicos inclinados por el culto a las imágenes y las procesiones. Para su presentación ha sido vestida magistralmente por el diseñador David Calleja.

El envío se llevará a cabo con la talla desmontada, pero con instrucciones precisas para que una vez en su destino se pueda volver a ensamblar perfectamente.

Para el escultor e imaginero gaditano, esta efigie ha sido un hermoso proyecto originado el pasado mes de abril, en pleno confinamiento, que, afortunadamente, ha podido ver la luz estos días, circunstancia que no ha sido posible en otros trabajos realizados por Ángel Pantoja para el ámbito nacional debido a la crisis sanitaria.