Desde el pasado 10 de enero, la sala de exposiciones de la Fundación de Cultura Andaluza (FUNDECA) acoge una muestra de esculturas de los artistas Alberto Germán Franco Romero y Guillermo Martínez Salazar. La FUNDECA es una fundación cultural, sin ánimo de lucro, que tiene como fin principal el mecenazgo y la promoción de actividades que ayudan a conocer y a entender el ambiente cultural de Andalucía, a través de la organización de actividades relacionadas con el cine, el teatro, la poesía, la música y el arte.

Guillermo Martínez Salazar (Alcaudete, Jaén, 1973) reside desde hace muchos años en Sevilla, ciudad en la que realizó sus estudios de Bellas Artes. Fue discípulo de Juan Abascal Fuentes, forjando desde entonces un estilo especializado en la escultura sacra que, al igual que su maestro, posee una especial predilección por las técnicas de los grandes autores del barroco sevillano. Premiado en la Bienal "Sebastián Santos", Guillermo Martínez cultiva con frecuencia el dibujo y el género del retrato dentro de la vertiente escultórica civil, caracterizándose por su gran realismo. Es también co-autor de publicaciones sobre composición, modelado e infografía aplicada a la anatomía, y ha colaborado en muchas otras de carácter artístico e histórico.

Alberto Germán Franco Romero (Sevilla, 1970) ejerce al igual que Guillermo Martínez labores de docencia en el departamento de Escultura e Historia de las Artes Plásticas de la Universidad de Sevilla. En su estudio-taller del municipio onubense de Aracena labra numerosas esculturas de diversas temáticas -monumental, taurina, religiosa- empleando diferentes materiales en su ejecución -bronce, madera, piedra, terracota, metal, resina-, desplegando en todos los casos gran creatividad e inventiva dentro de una base clásica que, en parte, también encuentra sus raíces en el barroco. Creador también de espacios teatrales y proyectos publicitarios, Germán Franco es además uno de los mayores expertos en la obra del artista Antonio León Ortega.

Entre las actividades de la FUNDECA se encuentra la organización de cursos, seminarios, exposiciones, mesas redondas, etcétera; edición de revistas culturales y difusión de medios de expresión culturales; subvención a las entidades que contribuyan a la formación integral de las personas; ayuda a las personas sin recursos para recibir una completa formación cultural, y promueve y crea instrumentos materiales, locales, instalaciones, etcétera, para el desarrollo de actividades de formación cultural, profesional y humana de todo tipo de personas.