FRANCISCO GONZÁLEZ FERRERAS
Con información de Julián González Prieto y José García García
Nacido en Cistiernas (León), en el año 1931, comienza desde muy joven, con tan sólo 13 años de edad, el aprendizaje del trabajo de la madera en Vizcaya, lo cual le llevará, por una parte, a ejercer la ebanistería como medio de vida y, por otra, a desarrollar su afición por las maquetas artísticas. Su primera producción, realizada con 16 años, sería la de la Catedral de León, por la que siempre sintió una admiración especial.
Establece su residencia y taller en las cercanías de la capital leonesa y, con el tiempo, se dedica en exclusiva a reproducir, en pequeño formato, los principales monumentos. Comienza por los de León y su provincia, abarcando progresivamente otras regiones españolas: Asturias, Castilla y León, Navarra, La Rioja y Galicia, e intentando poner de relieve el arte en el Camino de Santiago, tema que va a dar unidad a toda su obra.
Francisco González Ferreras ha recorrido todos los rincones donde están ubicados estos edificios, midiéndolos exhaustivamente, realizando minuciosos trabajos de campo e investigando el estilo arquitectónico al que pertenece cada uno de ellos. Tras muchas horas de observación y documentación, y después de calculada la escala y llevados los detalles al papel, ha reproducido estas obras en madera de nogal.
El gusto por la realización de la obra en sí se une en este artesano al deseo de promover la admiración de los ciudadanos hacia las obras de arte arquitectónico, y así mismo, fomentar su conservación. Este intento de acercar los tesoros monumentales al pueblo le ha llevado al autor a exponer sus obras en numerosas entidades culturales de León, Madrid, Salamanca, Pamplona y Avilés, así como a colaborar en diferentes actividades pedagógicas.
Ha querido este artista con sus obras rendir homenaje a los hombres que, en el pasado, tomándole gusto a la dificultad, escribieron estas páginas de historia a cincel, en forma de asombrosos monumentos. Ya no es preciso viajar a su lugar original para admirar tan bello monumento en sus más nimios, como él propio González Ferreras dice, reconcomios o detalles. Alguno está realizado por fuera y por dentro, en un alarde de perfección.
Entre sus reproducciones se encuentran la Catedral de Santiago de Compostela, la Catedral Vieja de Salamanca, la mencionada Catedral de León, la Iglesia de San Martín de Tours en Frómista (Palencia), la Iglesia de San Marcos en León, la Iglesia de Santa María del Naranco en Oviedo (Asturias), la Real Colegiata Basílica de San Isidoro en León, la Iglesia de San Tirso en Sahagún (León) o la Iglesia de la Asunción de Vegaquemada (León).
La moneda por él pagada por sus obras ha sido "en horas", sus horas. Organizado y meticuloso las tiene bien apuntadas. La más cara es la Catedral de Santiago que le costó 5.200 de sus horas, la Catedral de León 3.200, la Colegiata de Toro (Zamora) 2.100, San Juan de Baños (en Baños de Cerrato, municipio de Palencia) 1.140, la Iglesia de Marialba de la Ribera (León) 950, y así sucesivamente con todas y cada una de ellas.
Economista y ahorrador, todas las obras de Francisco González Ferreras han salido de un camión de astillas de nogal que hace muchos años compró por la suma de 15.000 pesetas. Los leoneses están en deuda permanente con este leonés de pro, paciente, pacífico, habilidoso, perfeccionista e incansable trabajador de su propia mejora, mientras no se habilite un espacio digno que sirva de exposición permanente de su obra.
Exposición Faros en el Camino hasta el 31 de Agosto de 2010 en el Edificio Botines de León
(Plaza del Obispo Marcelo, nº 5) Horarios: todos los días, de 12:00 a 14:00 y de 18:00 a 21:00 horas.
