CORONATIO, comisariada por el historiador del arte Joaquín Bernal Ganga (Universidad de Murcia), permite al espectador adentrarse en este misterio que, tras la posguerra, y junto a otros misterios procesionales, sufre un especial renacer, comenzando a impulsarse la creación de nuevos conjuntos procesionales para los cortejos pasionarios, abriendo la "veda iconográfica" la Cofradía de la Flagelación de Orihuela en 1959 con la obra de Manuel Ribera Girona, seguida en 1963 por la Cofradía California de Cartagena con el grupo de Collaut-Valera.

Tras este inicio iconográfico, 40 años después, Hernández Navarro comenzó a labrar un camino que lo llevaría a ser el escultor actual que más veces ha representado este misterio de la Pasión de Cristo, concretamente hasta cinco grupos procesionales de diferente composición que crean una verdadera riqueza iconográfica en el campo destinado a la representación de este misterio, grupos que serían realizados en el año 1982 y 2009 para Murcia, en 1992 para Hellín, en 2002 para Totana y en 2020 para Bullas. La presencia en la muestra de hasta tres de estos grupos permite al espectador estudiar y analizar la evolución de este escultor, continuador, de alguna manera, del legado de otros grandes escultores ‘'modernistas'' como lo fueron Capuz, González Moreno o Benlliure.

Los tres grupos escultóricos de Hernández Navarro, y a modo de particular abrazo entre la escuela andaluza y la murciana, en claro reflejo de la unión de las mismas en la Semana Santa de muchas de las localidades regionales, se sitúa el grupo escultórico de Romero Zafra, la Coronación de Espinas de la Cofradía del Nazareno, Alfa y Omega de la exposición y que viene a mostrarnos las disparidades existentes entre la Escuela barroca murciana y la Escuela barroca andaluza. Hernández Navarro frente a Romero Zafra.

Y como telón de fondo del primer espacio expositivo, el magnífico estandarte bordado en raso, seda y canutillo de oro del Paso Azul de Lorca. La única representación bordada de Cristo siendo coronado de espinas, obra de Miguel García Peñarrubia y procedente del Museo Azul de la Semana Santa (MASS) de Lorca.

En el segundo espacio expositivo de CORONATIO, el espectador puede disfrutar de nuevo de esa confrontación de las corrientes estilísticas del sureste español. De esta manera, logra conocer de cerca la obra de los autores hispalenses Fernando Aguado, con su Coronado de Espinas de La Roda (Albacete), y Darío Fernández, autor de Jesús Salvador de los Hombres en su Coronación de Espinas de Elche, obra galardonada con el XIII Premio La Hornacina. Junto a ellos, dos obras más levantinas o impregnadas de ese carácter: el Humildad y Paciencia del escultor hellinero José Gabriel de Barra, ubicado en la vecina Abarán, y el Coronado de Espinas de Jumilla, obra de Mariano Spiteri, enfrentando a la escuela castellana de escultura frente al neosalzillismo de su autor.

Completan la sala algunos bocetos de Hernández Navarro, el "modellino" de la Coronación de Espinas de Romero Zafra, el paño de la Verónica de Pascual Campos, un interesante dibujo de la Coronación de Espinas obra de Carrillo Marco, los bocetos previos del trono de la Coronación de Espinas y partituras de marchas procesionales dedicadas a la Coronación de Espinas. En definitiva, como señaló la concejala de Semana Santa, María Turpín, esta muestra "refleja lo que es la Semana Santa de Interés Turístico Internacional de Cieza".

CORONATIO puede visitarse hasta el próximo 20 de octubre en el Museo de Siyâsa de Cieza (Calle San Sebastián, 17) dentro del siguiente horario: martes a sábado, 11:00 a 13:30 y 17:30 a 21:00 horas; domingo, 10:30 a 14:00 horas. El cartel de la muestra ha sido pintado por el artista ciezano Villa Vázquez.