EL GRAND VERRE
07/02/2007
La complacencia, la paradoja, la metaironía, el juego de lo visual y la tendencia a la paranomasia y a los significados múltiples convierten en enigmáticas las creaciones del artista francés Marcel Duchamp (1887-1968). Su obra La Mariée Mise à Nu Par Ses Célibataires, Même (algo así como La Novia Desnudada por sus Solteros, Inclusive), popularmente conocida como el Grand Verre, constituye una de las piezas más enigmáticas de su siempre interesante autor y de todo el arte contemporáneo. Pintada al óleo, sobre dos placas de vidrio de 270 x 170 cm, y utilizando también materiales como el barniz, la hoja de plomo, el hilo de plomo, e incluso el polvo, Marcel Duchamp la dejó "definitivamente inacabada" en 1923. Su título alude a una historia de amor imposible y ha sido objeto de distintas lecturas por la ambigüedad premeditada que el autor introdujo en la pieza. La mitad superior-izquierda del vidrio de Duchamp está ocupada por una compleja maquinaria que representa a la novia, ocupando el centro una nube grisácea, llamada "La Vía Láctea", que envuelve tres recuadros, cajas vacías o pistones. En el extremo derecho, debajo de la nube, hay una zona de puntos. En la mitad inferior-izquierda, se encuentra el grupo de los solteros, llamados también "Los Nueve Moldes Machos" y dispuestos según las leyes de la perspectiva clásica. Los solteros están unidos por hilos de plomo al llamado "Tamiz o Parasol", compuesto de siete sombrillas dispuestas en semicírculo. Entre "Los Nueve Moldes Machos" se encuentra "La Corredera", una especie de trineo o carrito con patines que alberga en su interior una maquinaria denominada "El Molinillo de Agua". Por último, dominando la superficie inferior, aparece "El Molinillo de Chocolate", conectado a tres círculos parecidos a los utilizados por los ópticos, que reciben el nombre de "Testigos Oculistas". La ambigüedad de los símbolos, su enigma y sus significados han sido tema de interpretaciones que han relacionado al Grand Verre con el esoterismo, la alquimia, la cábala, la religión y el simbolismo, entre otros. La obra se expuso por primera vez en la Exposición Internacional de Arte Moderno, celebrada en el Museo de Brooklyn en 1926, y debido a un accidente cuando era devuelta, las placas de vidrio quedaron quebradas. |
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