La Orden del Carmelo Descalzo incrementa notablemente en la Villa Ducal el patrimonio artístico religioso. En la Basílica del Sepulcro de Santa Teresa de Jesús ya se puede ver un Cristo crucificado de la Escuela granadina del siglo XVII, donado a la Orden por su propietario. Esta bella pieza ha formado parte de la exposición Artis Momentum.

En la entrada de la misma basílica podemos contemplar un óleo sobre lienzo con la escena de la Anunciación, titular mariana de la fundación teresiana albense. En este caso, la obra pertenece al pintor Matías Arteaga, integrante de la Escuela sevillana del siglo XVII. Este valioso cuadro ha sido cedido por sus propietarios en depósito.

En la recientemente inaugurada exposición sobre mujeres ilustres, De Claris Mulieribus, concretamente en el capítulo expositivo dedicado a la Virgen María, se ha incorporado una valiosa escultura de la Purísima Concepción (imagen superior), obra que ha sido catalogada de Alonso Cano, el afamado escultor y pintor de la Escuela granadina del siglo XVII, si bien su estilo remite al barroco más avanzado del taller de los Mora.

Las piezas más antiguas de la exposición datan del siglo XIV y las más actuales del siglo XXI. Un arco de ocho siglos de historia del arte en el que se contempla la belleza de la representación femenina de la mano de artistas de primera línea: Giovanni Boccaccio, Juan de Flandes, Federico Madrazo, Goya, Murillo, Romero de Torres, Juan Carreño de Miranda, Juan de Archieta, Pedro de Mena, Francisco Pacheco, Nicola Fumo, Isabel Guerra, Francisco Romero Zafra, Luis de Morales, José de Mora, Miguel Cabrera, Luisa Roldán, Juan de Juanes, Zurbarán... y escuelas artísticas españolas, italianas, flamencas, alemanas, mexicanas, guatemaltecas, brasileñas... de distintas épocas artísticas, por medio de las cuales se produce un acercamiento a mujeres ilustres de gran variedad, desde el siglo VI a.C. hasta el XXI. Veintisiete siglos de historias singulares de mujeres ilustres.

En esta muestra artística comisariada por Miguel Ángel González (OCD), director del Museo Carmelitano CARMUS, se ha procedido a la intervención y restauración de una veintena de piezas, para adecuarlas a las necesidades propias de una exposición y con el fin de que puedan ser contempladas en todo su esplendor. La adecuación de los espacios en los que se desarrolla la muestra, engrandecen, aún más si cabe, la belleza de las obras artísticas.

En el convento de San Juan de la Cruz, concretamente en las salas de exposición permanente "Entremos más adentro", podemos admirar la obra del Greco titulada Éxtasis de San Francisco de Asís (imagen superior). Este magnífico óleo sobre lienzo permanecerá en depósito permanente en el cenobio por decisión de sus propietarios. El lienzo se relaciona con la figura de Santa Teresa de Jesús, quien mostró gran devoción al "poverello" por considerarlo su alma gemela.

Por último, la iglesia de San Juan de la Cruz incrementó hace pocos meses su patrimonio artístico con una veintena de pinturas y esculturas de gran calidad, cuya catalogación abarca desde los siglos XV al XVIII.

En la capilla de esta misma iglesia se pueden contemplar siete obras de variada temática que van también desde el siglo XIII hasta el siglo XVIII. Estas piezas artísticas procedentes de la Colección Linares, han sido depositadas en el templo carmelitano y están expuestas a la contemplación de turistas y peregrinos: Niño Jesús de la Escuela de Malinas (siglo XV), San Sebastián (siglo XVI), un San Juan Nepomuceno que podemos atribuir a Luis Salvador Carmona (siglo XVIII, imagen inferior), talla flamenca de la Virgen (siglo XV), talla románica de la Virgen con el Niño (siglo XIII), Cristo crucificado (siglo XVI, imagen de cabecera) y un bodegón (siglo XVII) pintado por el flamenco Alexander Coosemans.