El retablo mayor del Convento de San José (vulgo San Cayetano) de Córdoba, está construido en madera tallada, dorada y estofada, con traza de Fray Juan del Santísimo Sacramento, y confirmado como ensamblador del ático Francisco Ruiz de Paniagua e hijos entre los años 1680 y 1697.

Arquitectónicamente se vincula a las trazas de Alonso Matías, creador del retablo mayor de la Catedral de Córdoba, pero su ornamentación preludia la plasticidad que tendrán las grandes obras del barroco cordobés.

Sobre un pedestal de piedra negra, hoy policromada, y con el antiguo frontal de altar de mármol de Carcabuey adosado, se dispone el banco, constituido por cuatro basamentos sobre los que se asientan las columnas de fuste tripartito y capitel corintio que dividen al cuerpo principal en tres calles.

En la calle central de este cuerpo se encuentra la caja principal ideada como gran arco del triunfo donde se venera la imagen de Nuestra Señora del Carmen, talla del siglo XVIII atribuida a Alonso Gómez de Sandoval, y los intercolumnios presentan hornacinas muy planas coronadas por los escudos de la orden.

El segundo cuerpo mantiene la estructura arquitectónica del cuerpo principal, con una composición central a modo de portada, donde se encuentra la imagen del titular del convento carmelita flanqueada por dos pares de columnas, y en los laterales otras dos hornacinas planas.

El diseño realizado por el tallista Miguel Ángel Arroyo González, y supervisado por el Padre Juan Dobado y el dorador Rafael Barón Jiménez, divide el camarín en tres cuerpos.

El primero lo forma un zócalo que recorre el perímetro combinando pilastras decoradas con frutas y lazos con paneles dorados y estofados con decoración vegetal.

El segundo cuerpo está estructurado por ocho paneles rectangulares con moldura perimetral y decoración vegetal tallada con una cartela central, dos de ellas con el escudo de la orden, y las restantes con letanías a la Virgen de Carmen: "FLOS CARMELI, PORTA COELI, STELLA MARIS".

Un ancho moldurón sirve de apoyo a la cúpula formada por un gran arco que se une a la embocadura del camarín del retablo y que sirve de partida a las seis cerchas que forman la cúpula.

Todo el camarín ha sido realizado en madera de cedro por los carpinteros Mariano y Rafael Villar, de Córdoba, tanto para las estructuras como para la ornamentación, y toda la talla se ha realizado a mano, sin utilizar pantógrafos para que todas las piezas sean originales, por el tallista Miguel Ángel Arroyo.

Todo el trabajo de madera se ha decorado con oro fino bruñido de 23 ¾ quilates, siguiendo los métodos del siglo XVII y XVIII, y parte de la talla ornamental y en las partes planas de los tableros se han policromado, estofando con temple al huevo y pigmentos naturales. Estas labores han sido efectuadas por el dorador Rafael Barón Jiménez, quien regenta el taller de dorado Nuestra Señora de la Salud.

El día de la bendición del camarín se pudieron admirar, entronizados en el retablo, los cuatro ángeles realizados por el escultor cordobés Francisco Romero Zafra para el paso procesional de la Virgen del Carmen. La bendición tuvo lugar el día 25 de Enero de 2012, festividad del Milagroso Niño Jesús de Praga.