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BUSTO DE CRISTO RESUCITADO Eduardo González Solís Resulta singular el modelado de la barba, a base de onduladas estrías que parten separadamente de la patilla. Tanto el nacimiento del encrespado cabello como la esmerada policromía de unos ojos que aún delatan el sufrimiento padecido, remiten a los modelos de Bernal. |
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BUSTO DE ROMANO Marco Antonio Humanes López El tratamiento del rostro es expresivo, con facciones contraídas y acusado gesto declamatorio. Frente a la actitud distante o al gesto hosco tan propios de este tipo de personajes secundarios, el autor opta por un semblante dramático que sugiere arrepentimiento y piedad. |
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DOLOROSA Alejandro Ugarte Rodríguez El caprichoso escorzo, resuelto con evidente afán de movimiento, contrasta con la serenidad de un rostro que expresa una angustia silente y moderada. De actitud itinerante, la posición de la cabeza, ladeada a la derecha, obliga a resaltar bastante los músculos del cuello. |
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VIRGEN DE LA MERCED Rafael Díaz Caro Pese a su advocación, posee una fisonomía propia de los modelos de María en su Soledad, con los labios sellados y la mirada resignada y absorta en su aflicción. Sin embargo, sus dedos se hallan recogidos para portar el pañuelo y el rosario, no los clavos ni la corona de espinas de Jesús. |
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BUSTO DE PILATOS Manuel Téllez Berraquero El autor fue el ganador de la pasada Bienal de Higuera de la Sierra (Huelva) con una notable talla del Ecce Homo. Ahora presenta en Espartinas un busto de gran expresividad que, precisamente, recrea al prefecto de Roma en el pasaje de la Presentación al Pueblo. |
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ESPEJO DE LOS AFLIGIDOS José María Ruiz Montes Nuevamente el artista malagueño demuestra su virtuosismo con el modelado del barro. Simulacro muy piadoso que representa a un Varón desfallecido tras los azotes recibidos, abrazado sin fuerzas al instrumento de tortura al tiempo que se identifica con el padecer de los afligidos. |
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VIRGEN DOLOROSA Rubén Fernández Parra Dolorosa intimista y cabizbaja, de labios semicerrados, pálidas carnaciones y ojos consumidos por el llanto. Los ricos matices de la pátina le otorgan impronta de pieza antigua. Las manos, de tipo tenedor, presenta dedos largos y rectos que sostienen el manípulo y el rosario. |
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BUSTO DE ROMANO Francisco Javier López del Espino Pese a su función de custodia del reo, se muestra pensativo, intuyéndose en su mirada una cierta compasión ante el destino de Jesús. El autor retrata a un soldado joven, de labios carnosos, cejas anchas y ojos de textura cristalina que realzan el naturalismo de la figura. |
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BUSTO DE DOLOROSA Eduardo González Solís Dolorosa de ojos hundidos, mirada elevada al cielo y óvalo rematado por puntiagudo mentón. Siete lágrimas vítreas surcan sus mejillas en alusión a los Siete Dolores de María. El detallismo a la hora de pincelar el ojo es propio de los artistas cordobeses Francisco Romero Zafra y Antonio Bernal. |
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CRUCIFICADO Enrique Ruiz Flores Pieza de gran interés, representa a Cristo vivo, suspendido por tres clavos sobre un madero de sección cilíndrica y arbórea. Muestra el torso adelantado y los labios entreabiertos, en actitud de pronunciar con dificultad una de las Siete Palabras de Jesús en la cruz. |
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