El boceto de la pieza, obra de Enrique Bendala Azcárate, fue presentado a los hermanos el 8 de junio del año 2001. Tras casi siete años de trabajo, el manto ha sido concluido el pasado mes de enero.

Sigue el estilo rocalla de las bambalinas -bordadas en 1940 por las Trinitarias de Sevilla-, las cuales sirvieron a su vez de modelo para el techo de palio, la saya y la toca estrenados en la Coronación Canónica de la Dolorosa.

El Taller de Bordados de la Cofradía de la Esperanza ha sido el encargado de llevar a cabo el manto; un obrador que, en una primera fase de realización, contó aproximadamente con 10 miembros, cifra que aumentó a 15 en la segunda fase, iniciada en septiembre de 2006.

A la hora de confeccionar el manto, en los últimos años han contado con varios hermanos del extinto Taller de Bordados de la Cofradía de los Estudiantes. En total, unas 25 personas han dado forma a la ilusión de toda la Cofradía de la Esperanza.

La pieza ha sido bordada en oro y sedas de colores sobre tisú verde y es rica en simbología mariana en cuanto a los elementos que lo componen. El diseño arranca desde el centro con el anagrama de María, superpuesto sobre un ancla desde donde parten roleos, azucenas, margaritas, tulipanes y multitud de motivos vegetales.

El eje central del manto termina en su parte superior con una granada (símbolo de la Iglesia y la fecundidad espiritual) y se remata por una jarra de la que brota un rosal con gran número de rosas y capullos abriendo. En su parte inferior, se cierra con haces de espigas (símbolo del carácter sacramental de la cofradía).

Todo el conjunto se encuentra rodeado por veneras, ces y róleos, además de doce estrellas que representan la Coronación de María. En el lateral derecho aparece un Pavo Real que simboliza la Realeza de la Virgen, mientras que en el izquierdo figura un pequeño gorrión o pajarillo, como símbolo de humildad.

La gran cenefa bordada que rodea toda la pieza se halla también compuesta por motivos vegetales y diversas variedades de flores que dejan ver un total de seis anclas; dos en la parte delantera, dos en la derecha custodiando el nombre Esperanza, y dos en la parte izquierda haciendo lo propio con la palabra Nuestra.

Toda la orilla del manto se encuentra bordada por una malla que contiene dos frases: comenzando por el lado izquierdo, se puede leer el saludo del Arcángel Gabriel a la Virgen en el pasaje de la Anunciación: "Dios te Salve María, llena eres de gracia, el Señor es contigo, Bendita Tú entre las mujeres, bendito el Fruto de Tu vientre", continuando con la respuesta de María hasta llegar al extremo derecho: "He aquí la esclava del Señor, Hágase en Mí según tu palabra".

La obra, con unas medidas aproximadas de 4,65 m de largo por 5,70 m de ancho, ha sido bordada con hilo de oro en sus variantes de hojilla, torzal, camaraña, granito, agua y la combinación de varios de estos materiales. Con puntos de ladrillo o zetillo, ladrillo doble, media onda u onda, punto de espiga, canutillo y lentejuelas, y enriquecido por las sedas de colores usadas para infinidad de elementos del manto. Todo ello ha dado forma a un conjunto rico en materiales, técnicas y colorido.

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