RESTAURACIÓN DE NUESTRA SEÑORA DE LA AMARGURA Y SAN JUAN
EVANGELISTA. COFRADÍA DEL NAZARENO (HUELVA)
1/11/2005
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La Virgen de la Amargura, titular de la Cofradía onubense del Nazareno, ha vuelto al culto público, coincidiendo con su besamanos el día de Todos los Santos, tras ser intervenida en Sevilla por Enrique Gutiérrez Carrasquilla.
El trabajo de Carrasquilla ha consistido principalmente en una exhaustiva limpieza de la policromía de la talla, muy oscurecida por el humo de las velas y la suciedad acumulada con el paso del tiempo. Para ello, la imagen ha sido sometida a una serie de tomografías que ofrecen unas imágenes computerizadas en tres dimensiones de la zona estudiada, lo que permite detectar elementos extraños en el interior de la obra y conocer al detalle su sistema constructivo para facilitar la labor reparadora.
Asimismo, se han colocado un nuevo sistema de articulaciones, nuevos postizos (lágrimas y pestañas), nueva peana y fijación de los pies de la imagen a la misma y se ha construido un nuevo armazón interno de una Dolorosa que se halla provista de piernas y pies, calzados con sandalias hebreas, tallados y perfectamente anatomizados. Esto último constituye un detalle característico de los imagineros levantinos, pese a que su autor, aunque valenciano de origen, desarrolló la mayor parte de su carrera en Jerez de la Frontera.
La imagen de San Juan Evangelista, titular de la hermandad que acompaña todas las Madrugadas a la Virgen en su estación de penitencia ha sufrido una intervención similar, aunque, en este caso, la imagen se encontraba en peores condiciones. Se le ha provisto de nueva peana, nuevo sistema de articulaciones y se le ha provisto de las pestañas superiores, perdidas por el paso del tiempo.
Actualmente, Carrasquilla se halla restaurando la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno, obra de Sebastián Santos Rojas en 1950 y titular cristífero de la corporación. Se tiene previsto que el trabajo esté acabado para el próximo mes de diciembre, consistente en dotar de una nueva peana y fijación de la imagen a la misma y limpieza y conservación de la imagen.
Como hemos apuntado, la Virgen de la Amargura es una imagen original del valenciano, afincado en Jerez, Ramón Chaveli Carreres (1938), muy retocada por Sebastián Santos en 1950, quien aplicó la actual policromía, tallándole además un nuevo juego de manos. Por las mismas fechas realizó la efigie de San Juan Evangelista, también restaurada por Santos, quién cambió su posición para conseguir un mayor dinamismo en el conjunto.
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