La Iglesia de San Juan del Hospital de Valencia, la más antigua de la ciudad tras la Reconquista, cuenta con una interesante imagen de la Virgen de los Desamparados (Mare de Déu dels Desamparats) realizada por el artista valenciano Pedro Arrúe de Mora, que ha sido donada por una persona allegada al templo.

La talla está inspirada en la primitiva escultura de los Desamparados, patrona de Valencia, de finales del siglo XVI que estaba desprovista de peluca, manto y otros elementos. Pedro Arrúe, pintor, escultor y restaurador, es un gran conocedor del venerado icono mariano, y en su valiosa colección de arte sacro se encuentran pinturas de distintas épocas que representan a la Geperudeta y han sido cedidos para varias exposiciones.

La nueva escultura, que ya recibe culto en la capilla del templo dedicada a Santa María Madre de Dios -donde se situaba la pintura de la Virgen de la Leche- recrea las visiones evangélicas del Apocalipsis, de ahí que la Señora aparezca como una mujer vestida de sol y coronada con estrellas. También aparecen la vara de azucenas, flores que simbolizan la virginidad de María, y los santos inocentes elevados sobre sus plantas.

La Virgen de los Desamparados de Arrúe cuenta con el rostro ovalado de ojos caídos y el pelo recogido al uso antiguo en un peinado. En su brazo izquierdo reposa el Niño Jesús, cargado con la cruz. Los dos niños que figuran a sus pies ratifican también sus títulos de Madre de los Inocentes, Mártires y Desamparados.