EL DETERIORO DE LA IGLESIA DE SAN FRANCISCO
EN VILLAFRANCA DEL BIERZO (LEÓN)

28/12/2006

Según informa el Diario El Mundo, los guardianes de la Orden Franciscana Seglar de Villafranca del Bierzo han denunciado el lamentable estado de deterioro en el que se encuentra el templo de San Francisco de la localidad leonesa, especialmente el mal estado de la cubierta, cuyas losas de pizarra se repararon por última vez en el año 1992, clavándose directamente sobre una plancha de conglomerado.

«Se están levantando en la actualidad, lo que han hecho ha sido una chapuza porque pusieron las tejas sin recortar y sin rastreles que les permitan una mayor fijación», señalan, al tiempo que alertan sobre el peligro que ocasionan las filtraciones de agua: «llueve dentro del templo y está pudriendo el artesonado, en muchas partes se puede ver que se viene abajo, eso sin contar el riesgo que supone para los visitantes a quienes se les puede caer una losa o el techo encima». Prueba de la alarmante situación en la que se encuentra la iglesia de San Francisco es que los guardianes han tenido que colocar calderos en numerosos rincones del templo del siglo XVII con el fin de recoger el agua que baja por los muros interiores del templo a consecuencia del mal estado en el que se encuentra la cubierta.

Las bóvedas mudéjar y gótica de las capillas de Ambrosio de Castro se están derrumbando sin que el Gobierno regional responda a las advertencias de los miembros de la Orden Franciscana Seglar quienes custodian el templo. «Nosotros no podemos hacer más, hemos gastado 3.000 euros hace un tiempo para cubrir las humedades y arreglar alguna teja», señalan. Unas medidas que resultan claramente insuficientes para salvar uno de los monumentos más importantes que existen en el Bierzo. La humedad afecta ya a diferentes zonas de la iglesia las cuales se perderán si no se toman medidas urgentes. Un ejemplo de ello es también la capilla de la Orden Franciscana Seglar cuyo artesonado presenta un avanzado estado de deterioro «se puede ver que tiene partes podridas» apuntan los responsables. El mal estado de conservación, el agua y el calor, también están dañando los testigos de la fachada y los contrafuertes por los que penetra el agua «están rajados, abiertos por la humedad», aseguran.

Vicente del Valle y Norberto González ya no saben a quien recurrir para tratar de salvar el antiguo convento de San Francisco de manera que se pueda garantizar, no sólo la permanencia y conservación del monumento, sino también la seguridad de los miles de visitantes que cada año se acercan hasta el templo para contemplar, su inmenso artesonado mudéjar -el segundo más grande de nuestro país-, su portada románica o el retablo barroco churrigueresco que atesora.

El templo de San Francisco alberga además imágenes de singular importancia para los villafranquinos como son el propio San Francisco, Santo Tirso, la Verónica, la Dolorosa, San Juanín, el Cristo de Medinaceli, el Nazareno, la Cruz Grande, la Urna, la Oración del Huerto, la Magdalena o la Virgen de la O o del Buen Parto que ha participado en las Edades del Hombre.

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