El pasado sábado 30 de marzo, el escultor Blasco Rivero presentó en Marbella las tres primeras figuras del que será el nuevo grupo escultórico para la Hermandad del Calvario. Dichas figuras se presentaron con una gran acogida por parte de dicha corporación de penitencia y de la ciudad de Marbella. Procesionarán ya desde la próxima Semana Santa en la tarde del Jueves Santo por las calles de la localidad.

El misterio (boceto en barro en la imagen inferior) representa la exaltación de Cristo en la cruz. Dos de las nuevas figuras, dos legionarios romanos llamados "Atellus" (de pelo negro y tez morena) y "Brutus", tiran fuertemente de las cuerdas atadas al travesaño del madero; el primero de pie y frente a la cruz, con el casco y la lanza depositados en el suelo, mientras que el segundo se encuentra paralelo a su compañero, con una rodilla en el suelo y fuertemente girado por el esfuerzo acometido.

El martillo y las estacas de madera para anclar la cruz a las duras rocas del monte, aparecen a los pies de la misma, olvidadas por un tercer legionario romano, "Naso" ("el de la nariz grande"), que en vez de acometer su trabajo en la crucifixión se ha dedicado a recoger la ropa del reo. A este soldado también lo vemos de pie, con los ropajes de Jesús y la lanza en una mano, y con la otra sosteniendo unos dados con los que se jugarán las prendas los soldados rasos, ya que así estaba estipulado en sus salarios.

Falta el centurión "Longinos" ("persona alta") a lomos de su caballo árabe Pharao ("Faraón"), que con gran enfado se dirigirá a Naso, recriminándole, y le señalará la labor que debe desemplear. La figura del centurión se empezará a realizar en este mismo año, pero no se presentará hasta el año 2020. Conviene señalar que el crucificado titular es una obra del imaginero local José Dueñas Rosales (1995).

Las tres nuevas esculturas del artista ecijano Blasco Rivero están realizadas en madera de cedro, estucadas y policromadas al óleo, con hombros articulados en madera de sapelli y ojos de cristal. Como detalles observamos una gota de sudor que cae por la nuca de unos de los romanos que tira de las cuerdas, y una gota de sangre en una uña del pie como seña de identidad propia del escultor, presente también en otras imágenes de su autoría.