Esta composición escultórica de talla completa ha sido labrada por el escultor e imaginero cordobés en madera de cedro real, midiendo la imagen de San Juan de Ávila 160 cm de altura y el ángel 60 cm. Lleva acabados de policromías al óleo, dorados en oro fino de 23 3/4 quilates y estofados de temple al huevo.

La decoración de la capa pluvial y el capillo del santo está realizada a base de motivos ornamentales realizados en bajorrelieve, figurando en esta última prenda el escudo de la asociación a la cual va destinada una obra que se eleva sobre una peana con imitación a carey.

El ángel sostiene un bonete que ofrece al santo por su condición de Doctor de la Iglesia. A sus pies aparecen las dos mitras de obispo y arzobispo, así como el capelo cardenalicio, símbolos de los rangos eclesiásticos que rechazó y que, por ello, se representan en el suelo. San Juan de Ávila, ataviado con sonata, roquete, estola y capa pluvial, se halla en actitud predicadora mostrando a Cristo Crucificado.

La imagen es un encargo de la Asociación Privada de Fieles Providentia. Fue bendecida en la catedral almeriense con motivo de la clausura del año jubilar Teresiano. En dicho templo metropolitano también se encontraba la imagen de Santa Teresa de Jesús que José Antonio Cabello llevó a cabo para la apertura del Año Jubilar Teresiano y que todo el pasado 2015 ha presidido el altar mayor del mismo. La santa fue presentada en La Hornacina el 14 de noviembre de 2014.

Ambas efigies procesionaron hasta el templo del Sagrado Corazón de Jesús, sede de las Esclavas del Santísimo Sacramento y de la Inmaculada. En esta iglesia se encuentran al culto parte de las imágenes que Cabello ha tallado para dicha Asociación: la Virgen de la Divina Providencia, Santa Teresa de Jesús y San Juan de Ávila.