RESTAURACIÓN DE PEDRO MANZANO PARA SEVILLA

29/01/2006

Cierto a la vez que insólito, sobre todo tratándose de una imagen procesional para vestir de notable antigüedad. La talla de la Virgen del Mayor Dolor en su Soledad, una de las titulares marianas de la sevillana Cofradía de la Carretería, conserva su policromía original del siglo XVII.

Así lo ha manifestado su restaurador, Pedro Manzano Beltrán, a la edición sevillana del diario ABC: "Se ha comprobado que es la única que posee y que tiene pigmentos originales y no de fabricación industrial, lo que nos lleva a sostener que se trata de la policromía original". En la cabellera, tallada en la madera, sí se han aplicado policromías posteriores, según explica Pedro Manzano: "Se ha procedido a levantar los repintes, sobre todo propiciados por los alfilerazos, y se le ha devuelto el color original, apareciendo un pelilleado que antes no se le veía". Respecto al modelado de la cabeza, el restaurador declaró: "Es talla única y no existen ensambles. Y eso lo comprobamos también en los ojos, que no son de cristal sino que forman parte de todo el conjunto".

Además de la eliminación de repintes, la restauración llevada a cabo por Manzano ha consistido en sanear las manos, afectadas por un ataque de hongos, y labrar nuevo candelero en madera de cedro, sustituyendo al colocado por el escultor e imaginero sevillano Luis Álvarez Duarte en el año 1973.

Existen documentos que acreditan el encargo por 400 reales de una Dolorosa para la Cofradía de la Carretería a Alonso Álvarez de Albarrán, discípulo jerezano del afamado escultor e imaginero Juan Martínez Montañés, en el año 1629. A raíz de esta última intervención, todo parece apuntar a que estamos ante la creación original de Albarrán sin apenas modificaciones en su aspecto, lo cual también supondría afirmar que la restauración de Blas Molner, efectuada en el año 1812, no conllevó el retoque en la talla que varios historiadores aseveraron.

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