Imagen de Nuestra Señora del Carmen, de tamaño inferior del natural (58 cm de altura, el Niño mide 21 cm). Ambos han sido realizados en barro cocido y policromado al óleo, con ojos de cristal pintados artesanalmente y pestañas de pelo natural. Su destino es una colección particular de Gáldar (Gran Canaria).

Para la concepción de dicha obra mariana, Delgado Carrera ha buscado influencias en la propia escultura religiosa de las Islas Canarias, donde es habitual encontrar efigies de la Virgen del periodo gótico o de factura arcaica, muy hieráticas, que han sido complementadas posteriormente con niños provenientes de la escuela barroca genovesa, cuya composición presenta mucho dinamismo. Tales características han sido adaptadas a la propia forma de trabajar y entender la imaginería del joven artista.

La imagen ha sido vestida de cara a su presentación por Antonio Sanabria y Blas López. La confección del atuendo y del ajuar carmelita ha corrido a cargo de Miguel Ángel Bolaños, a excepción del bordado en sedas que lleva el escapulario, realizado por Juan José Guidet. Las piezas de orfebrería son de Raúl Cejas.