La restauración ha sido practicada en la imagen de María Santísima de la Merced, dolorosa titular de la Hermandad del Nazareno de Granada. Tan piadosa talla, muy representativa de la Escuela granadina de escultura, pertenece a la larga nómina de seguidores del gran maestro Pedro de Mena que trabajaron en la ciudad andaluza a lo largo del siglo XVIII.

El conservador y restaurador granadino Juan Manuel Pérez Muñoz ha realizado la intervención en las dependencias del convento de Madres Carmelitas Descalzas, sede canónica de dicha corporación de penitencia.

Los trabajos han sido de carácter conservativo, dirigidos principalmente a subsanar pequeños daños producidos por factores como los movimientos naturales de contracción y dilatación de la madera o las manipulaciones propias de una imagen procesional de candelero a la hora de vestirla y recibir culto.

La Virgen fue retocada en 1983 por el escultor e imaginero Antonio Barbero Gor para aplicarle nueva policromía y realizarle nuevo candelero y juego de manos abiertas, al gusto de las dolorosas sevillanas. En 2012 su policromía original fue rescatada por las restauradoras Inés Osuna y María José Ortega. Cuatro años antes también se habían recuperado las espléndidas manos originales entrecruzadas.