Francisco Javier López del Espino es un joven escultor e imaginero cordobés, discípulo de Antonio Bernal Redondo, cuya obra ha figurado ya en prestigiosas muestras de escultura sacra. Precisamente, en la última Exposición Nacional de Espartinas (Sevilla), pudimos contemplar un busto suyo de un soldado romano, modelado en barro cocido y policromado.

También del mismo material es la Dolorosa que hoy les presentamos en el portal, realizada para vestir. Al igual que el busto del soldado, posee ojos de textura cristalina y rasgos bellos y juveniles, además de un dolor callado y contenido para no desvirtuar la pretendida hermosura del rostro.

Si pulsan en la imagen, accederán a una galería fotográfica de una imagen que se muestra muy deudora de los prototipos marianos del maestro, aunque se advierten unos perfiles alargados y un semblante pensativo que contribuyen a otorgar personalidad propia a la pieza. Habrá que esperar a nuevos trabajos para comprobar la evolución que toma el incipiente artista en sus obras.