La exposición Ortega Bru: Vanguardia, mística, rebeldía, sueños, la más completa de las escasas muestras realizadas sobre Luis Ortega Bru hasta la fecha, reúne desde el pasado viernes 2 de diciembre en ArsMálaga Palacio Episcopal (Plaza del Obispo 6, Málaga) una selección de las creaciones claves de este célebre escultor y pintor de San Roque (Cádiz) con motivo del centenario de su nacimiento.

A lo largo de 400 metros cuadrados, el discurso expositivo, siguiendo un criterio estético-biográfico, trata de contrastar la obra procesional con otras piezas, profanas y religiosas, en las que puede observarse el conocimiento que Ortega Bru tuvo de las Vanguardias históricas y la adecuación, instrumentalización y proyección de las mismas sobre el lenguaje manierista y barroco.

De entre las 80 esculturas, pinturas y dibujos que pueden verse en la exposición, destaca la propia imagen de Jesús de la Pasión (ver enlace), titular de la entidad organizadora. Junto a ella podrán verse otras obras religiosas de cofradías andaluzas que se dispondrán de tal forma que, respetándose su valor devocional, puedan advertirse los recursos estéticos y formales aplicados por su creador. Entre las piezas expuestas destacan esculturas pertenecientes a las hermandades de Santa Marta, Sagrada Cena y Macarena (Sevilla), Vera+Cruz (Huelva), Huerto (El Puerto de Santa María) y Angustias (Jerez de la Frontera).

El grupo principal de las piezas proceden del patrimonio familiar del artista, conservadas por sus hijos Ángel, Carmen y Débora. El Museo Ortega Bru, establecido en la localidad natal del escultor y pintor, contribuye cediendo para la ocasión siete obras de su colección permanente -caso del Eco, las Tres Gracias, los modelos en yeso de los medallones de la puerta del Vaticano (dos de ellos en las imágenes que acompañan la noticia) y el busto que sirvió de boceto para el Cristo del Soberano Poder la Hermandad de San Gonzalo (Sevilla)-, así como otras aportaciones procedentes de coleccionistas privados y parroquias.

A la par de la exposición, se ha diseñado un encuentro científico en el que, desde distintas disciplinas, se reivindique la fortuna crítica de Ortega Bru como uno de los autores más relevantes del arte español, afirmación que es producto de las investigaciones que se han desarrollado en los últimos años. Se celebrarán los jueves 15 y 22 de diciembre de 2016, así como 12, 19 y 26 de enero de 2017, a las 20:00 horas. En ellos participarán los profesores-doctores que integran el comité científico-técnico: Juan Antonio Sánchez López (UMA), Andrés Luque Teruel (US), Jesús Miguel Palomero Páramo (US) y Javier González Torres (Fundación Victoria-UMA). Se completa con una mesa redonda, moderada por el doctor Francisco José González Díaz, en la que participarán Ángel Ortega Bru (escultor e hijo de Luis Ortega Bru), Irene Aranega López (directora del Museo Ortega Bru), Antonio Pérez Girón (cronista de San Roque), Benito Rodríguez Gatíus (historiador del arte y primer biógrafo de Ortega Bru) y Suso de Marcos (escultor).

Luis Ortega Bru (San Roque, Cádiz, 16 de septiembre de 1916 - Sevilla, 21 de noviembre de 1982) fue un escultor y pintor español. Su padre era un alfarero, que influyó en que desde bastante pequeño se dedicase a modelar figuras en barro, de ahí que sus comienzos fueran en la alfarería y la cerámica. En 1931 estudia escultura en la escuela de Artes y Oficios de La Línea de la Concepción (Cádiz), y en 1934 recibe clases de dibujo con el maestro y poeta de San Roque, José Domingo de Mena. La Guerra Civil marcó su trayectoria, ya que sus padres fueron fusilados durante la contienda y él, que también militó en el bando republicano, fue condenado en 1940 a tres años de prisión por un delito de auxilio a la rebelión.

En 1944 Ortega Bru se trasladó a Sevilla, matriculándose en la Escuela de Artes Aplicadas. En esta ciudad comenzó a ser conocido en los círculos artísticos, realizando su primera exposición en 1949. En 1952 recibió el primer premio nacional de Escultura por La Piedad. En 1955 se trasladó a Madrid como maestro escultor de los Talleres de Arte Granda, abriendo posteriormente estudio propio en la capital. En 1978 regresó a Sevilla, trabajando primero en el taller de Guzmán Bejarano y después en un taller propio en la calle Castellar.