Se trata de una imagen de 164 cm de altura, obra del escultor e imaginero jiennense, afincado en Madrid. Talla completa en madera de cedro y policromada al óleo, representa al Santo Hermano Pedro (Pedro de San José Betancourt. Vilaflor de Chasna, Santa Cruz de Tenerife, 1626 - Santiago de los Caballeros de Guatemala, 1667), el religioso terciario y misionero canario que fue llamado "apóstol de cautivos" y "protector de indios" durante la época colonial por su dedicación a los indígenas sometidos a ultrajes y trabajos inhumanos.

Martínez Rodríguez ha querido realizar una imagen realista y moderna. El Santo Hermano Pedro se muestra en posición caminante, con el bastón en una mano y la campana en la otra. De esta forma, se recuerda la preocupación que tenía el santo por la oración y por la llamada a ayudar a los pobres.

Una talla que ha sido realizada para la Catedral de San Cristóbal de La Laguna. La totalidad de su financiación ha corrido a cargo de la asociación "Amigos de la Catedral", gracias a la venta de lotería, donaciones y aportaciones de sus propios integrantes. De hecho, la presidenta de esta asociación, Pilar Rupérez, ha sido la persona que, desde un primer momento, impulsó la idea de que el templo catedralicio de La Laguna contara con una imagen del primer santo canario, canonizado en 2002 en Ciudad de Guatemala.

Recordamos que, hace once años, el artista realizó otro bello simulacro del Hermano Pedro, presentado en La Hornacina el 7 de junio de 2011. En ese caso la obra era para Los Realejos y, al igual que la que nos ocupa de La Laguna, mostraba al santo pidiendo limosna, una de sus tareas junto con las visitas a presos y enfermos.