Se trata de María Santísima de la Paz y Esperanza, titular mariana de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Despojado de sus Vestiduras, de Alcalá de Henares (Madrid), para la que el escultor, imaginero y restaurador realizó también la imagen del Cristo, presentada en La Hornacina el pasado mes de enero.

La Virgen, de tamaño natural (mide 179 cm de altura) fue presentada el pasado 22 de octubre en la capilla del Mayor Dolor (Plaza de Molviedro), sede canónica de la popular hermandad sevillana del Despojado; la cual, al igual que sucedió con la imagen del Señor, amadrinó la bendición de la dolorosa alcalaína. El 29 del mismo mes, María Santísima de la Paz y Esperanza se bendijo en su templo de Santo Tomás de Villanueva del barrio de Espartales. Tras la ceremonia, recorrió sus calles en procesión extraordinaria.

Esta nueva dolorosa, tallada en madera de cedro con policromía al óleo (incluidos los ojos), lleva en su rostro tres lágrimas de cristal y pestañas superiores de pelo natural. La fisonomía repite las modelos del artista: rostros muy carnosos y totalmente idealizados, ojos rasgados de mirada frontal y manos muy naturalistas.