El pasado 8 de octubre fue inaugurada en Carmona (Sevilla) esta escultura monumental de San Juan Grande que permanecerá ubicada en la lonja de San Pedro y que el Ayuntamiento de la localidad ha acordado erigir con motivo del XXV aniversario de la canonización de tan insigne hijo natal.

La imagen mide 180 cm de altura sin la peana. Ha sido labrada por el escultor e imaginero sevillano en piedra artificial, imitando el mármol blanco. Representa al llamado "apóstol de la misericordia" de pie, agarrando fuertemente una cruz con la mano izquierda como emblema de su fe inquebrantable y de su amor a Cristo, mientras la derecha se halla extendida simbolizando su atención a los enfermos y a los pobres.

Dicen que la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios tuvo como cabeza pensante al carmonense Juan Grande (1546-1600), de ahí que el artista haya querido imprimirle una impronta inteligente a la vez que bondadosa.

Su figura es también muy venerada en Jerez de la Frontera, donde llevó a cabo la mayor parte de su ministerio espiritual, al residir en ella desde los 19 años de edad, y donde reposan sus restos en un santuario consagrado a su memoria y culto. De hecho, en 1986 llegó a ser nombrado patrón de la Diócesis de Asidonia-Jerez.

La iniciativa de esta efigie surgió del templo de San Pedro en Carmona, siendo sufragada por el consistorio. Ya que no se conocen retratos del santo, Rubén Fernández Parra se ha inspirado en unos lienzos del siglo XVIII sobre la vida de San Juan Grande que se conservan en la mencionada iglesia.