Se trata de una talla realizada en madera de cedro policromada al óleo del Dulce Nombre de Jesús para el templo parroquial de San Sebastián en Arenas del Rey (Granada). Es imagen de vestir, con una altura de 55 cm, completamente articulada y anatomizada en las partes que son visibles al espectador.

El Niño se presenta en actitud de acogida hacia el fiel, caminando y con gesto afable pero a la vez melancólico, como si anticipara su sacrificio. Lleva ojos de cristal pintados y pestañas de pelo natural en el rostro. De base tiene una peana de madera inspirada en los diseños creados por Pedro de Mena en el siglo XVII.