Se trata de un busto de Dolorosa realizado en madera de cedro y telas encoladas, policromado y patinado al óleo, para el culto de la Familia Rejón-Perea, de Granada.
NUEVA OBRA DE JUAN CARLOS VÁZQUEZ PICHARDO PARA GRANADA
17/08/2007
Se trata de un busto de Dolorosa realizado en madera de cedro y telas encoladas, policromado y patinado al óleo, para el culto de la Familia Rejón-Perea, de Granada.
La efigie sigue el concepto que ya inició siglos atrás el insigne escultor Pedro de Mena y Medrano en las imágenes sobre el mismo tema, por cuanto se halla modelada hasta la altura del pecho, ofrece un dolor íntimo y resignado, y figura recortada sobre una peana de madera oscura, para no restar protagonismo visual a lo esencial de la obra.
A pesar de lo dicho anteriormente, según comenta Juan Carlos Vázquez Pichardo a La Hornacina: "la obra guarda ciertas diferencias, por cuanto el rostro ha sido dulcificado y la tez oscurecida, cumpliendo así el deseo del mecenas, que la obra posea el “toque sevillano” de las dolorosas realizadas a lo largo del siglo XX".
Pinchando en la imagen que aparece a su izquierda, podrán ver una completa galería de fotos de la pieza, facilitada por el imaginero sevillano.
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