LA VIRGEN DE LA ENCARNACIÓN (SEVILLA). DOLOROSA ATRIBUIDA A BLAS MOLNER
21/10/2021
Coincidiendo con la efeméride del primer centenario de la reorganización de la archicofradía sevillana de San Benito en el barrio de la Calzada, y enmarcada dentro de los actos que dicha corporación de penitencia va a celebrar a lo largo de este último trimestre de 2021, el próximo lunes, 25 de octubre, verá la luz una nueva publicación donde se recoge la hipótesis de atribución de la autoría de su titular mariana, la Virgen de la Encarnación, al escultor e imaginero Blas Molner (Valencia, 1738 - Sevilla, 1812). Para dar a conocer todo el caudal informativo referente a esta novedosa atribución, se ha organizado para la citada fecha una mesa redonda, que se celebrará en el templo parroquial de San Benito Abad a las 20:30 horas y que contará con la participación del autor del libro, David Molina Cañete, y del restaurador de la imagen, Juan Manuel Miñarro López, siendo presentada y moderada por el periodista Víctor García-Rayo Luengo. David Molina, historiador del arte, es autor de la monografía sobre la Hermandad de San Benito (2004) y director del boletín informativo de dicha corporación de penitencia desde 1997. Su publicación es una puesta al día del estudio histórico-artístico que llevó a cabo junto a los trabajos de conservación y restauración a los que fue sometida la venerada imagen por parte de Juan Manuel Miñarro en 2014. Desde entonces se ha seguido investigando para reconstruir de manera rigurosa su compleja historia material, así como para establecer un marco cronológico, no solo de la hechura de la dolorosa, sino de las distintas evidencias materiales que han sido fruto de transformaciones o intervenciones realizadas a lo largo de diferentes siglos, lo que ha permitido ahora plantear una hipótesis sobre la autoría de esta venerada imagen mariana. Este libro, cuyo título es Nuestra Señora de la Encarnación. Estudio histórico-artístico, viene avalado por Juan Manuel Miñarro como autor de la restauración y estudio analítico -ha escrito, además, el prólogo del libro- y por el asesor histórico de la intervención, el catedrático de Historia del Arte de la Universidad de Sevilla (US) José Roda Peña -que firma la presentación del libro-, con quienes David Molina ha trabajado mano a mano desde el momento en que la dolorosa llegó al taller del imaginero para su restauración. Técnica y morfológicamente la Virgen de la Encarnación puede vincularse con la obra de Molner, si bien en la actualidad presenta una serie de modificaciones estéticas que han dificultado su adscripción al catálogo pasionista del imaginero. Todas estas vicisitudes por las que ha pasado la imagen a lo largo de su historia material quedarán explicadas en la publicación. Igualmente podremos conocer la relación técnica y morfológica entre la dolorosa del Martes Santo sevillano y otras imágenes tanto documentadas como atribuidas con certeza a la mano del artista valenciano. En cuanto a la fecha de ejecución, el investigador la encuadra entre los años 1780 a 1793, fechas en las que no se conserva documentación emanada de la propia hermandad. Desde La Hornacina siempre hemos defendido la datación dieciochesca de la Virgen de la Encarnación, pese a haber sido catalogada por la mayoría de los expertos en el siglo XVII, habiendo incluso quien situaba su ejecución en el siglo XVI, teniendo en cuenta siempre las restauraciones a las que ha sido sometida, como la de Sebastián Santos Rojas en la década de 1940. Asimismo, al restaurar Juan Manuel Miñarro otra interesante dolorosa, la Virgen de los Dolores del municipio sevillano de La Puebla del Río (ver enlace), advertimos sus grandes similitudes con la dolorosas sevillanas de la Estrella y de la Encarnación, en la mitad superior e inferior de su rostro, respectivamente. La dolorosa de La Puebla del Río, de tamaño inferior al natural y manos entrelazadas, estaba también catalogada como obra anónima del siglo XVIII. Blas Molner Zamora se formó como escultor en su ciudad natal, llegando a Sevilla en 1766. Fue cofundador de la Real Escuela de las Tres Nobles Artes en 1771, ejerciendo desde 1775 como director del área de Escultura y ocupando el puesto de director general desde 1793 hasta su fallecimiento. Es uno de los últimos exponentes de la escuela barroca sevillana de escultura, acercándose progresivamente al estilo neoclásico que se puso de moda en su época, y su obra está diseminada en buena parte de la geografía española, con piezas en Navarra, Badajoz, Huelva, Córdoba, Cádiz o Santa Cruz de Tenerife, además de Sevilla y provincia. Entre los ejemplos de obras de Blas Molner en Sevilla, tenemos como creaciones documentadas el San José de la Archicofradía de Pasión (1781) y las efigies de San Pedro, San Leandro y San Bernardo para el altar mayor del templo parroquial de San Bernardo (1784-1785). Por otra parte, entre las atribuciones fidedignas podemos consignar, entre otros, los grupos de la Santísima Trinidad del templo de Santa María la Blanca y de la Sagrada Familia del templo de San Andrés, así como el San Elías, el San Rafael y el Santo Ángel Custodio del convento del Santo Ángel y la Asunción de la iglesia del hospital de Nuestra Señora de la Paz. |
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