El Servicio General de Investigación (SGI) Laboratorio de Rayos X (LRX) del Centro de Investigación, Tecnología e Innovación de la Universidad de Sevilla (CITIUS) participa, junto al grupo de Física Nuclear Aplicada de la Universidad de Sevilla, en la caracterización de la policromía del retablo mayor de la Parroquia del Sagrario de la Catedral de Sevilla.

El SGI-LRX oferta a sus usuarios el análisis mediante difracción de rayos X, fluorescencia de rayos X y microtomografía axial computarizada. En este caso, el análisis composicional de las tallas ha sido llevado a cabo utilizando el equipo portátil de fluorescencia de rayos X (XRF) de este Laboratorio.

El retablo representa en su gran escena central la Piedad o el Llanto sobre Cristo muerto (Jesús, la Virgen, San Juan, Los Santos Varones y Las Tres Marías, junto con el altorrelieve del Calvario). Incluye también la Santa Mujer Verónica, La Asunción, el relieve de la Entrada en Jerusalén, dos tondos y diversos ángeles y serafines. Fue instalado en su actual emplazamiento en 1840, procedente de la capilla de los Vizcaínos del demolido Convento Casa Grande de San Francisco.

"La utilización de este nuevo equipamiento portátil, financiado con el Fondo Europeo de Desarrollo Regional, ha permitido realizar las medidas sin necesidad de trasladar las imágenes posicionadas a varios metros de altura", comenta Simona Scrivano, técnica del SGI-LRX.

Los análisis han sido llevados a cabo en el marco del proyecto de investigación "Protocolo de caracterización in situ de obras pictóricas mediante técnicas nucleares no destructivas y otras técnicas no invasivas: aplicación a las colecciones del Arzobispado y Catedral de Sevilla, así como a otras obras de alto valor artístico" durante las intervenciones de restauración del retablo, obra realizada entre 1665 y 1669 por Pedro Roldán (esculturas), Juan de Valdés Leal (pintura) y Francisco Dionisio de Ribas (mazonería).

La intervención, promovida por el párroco Manuel Cotrino Bautista y acometida a través de la Delegación Diocesana de Patrimonio Cultural, se ha desarrollado durante los últimos siete meses y concluyó el pasado mes de septiembre. Para su ejecución se ha contado con un equipo de siete conservadores-restauradores, todos ellos coordinados y dirigidos por Antonio Gamero y Agustín Martín, técnicos de la Delegación de Patrimonio de la Archidiócesis de Sevilla.

Este retablo sustituyó a uno anterior diseñado y ensamblado entre 1706 y 1709 por Jerónimo Balbás, del que solo se conserva la imagen de San Clemente que se reutilizó para rematar el actual. El santo es obra de Pedro Duque Cornejo, autor de todas las esculturas del retablo de Balbás. Pese a los elogios que recibió dicha gran fábrica barroca, fue destruida en 1824 por el gusto academicista del momento, que la consideró excesiva y de mal gusto.