NUEVA DOLOROSA DE ALFONSO CASTELLANO TAMARIT
PARA VILLANUEVA DE CÓRDOBA

19/01/2007

Se trata de una imagen en madera de cedro policromada, de vestir, que ha sido realizada por el imaginero entre finales de 2006 y principios del presente año. El destino de la obra, de tamaño ligeramente inferior al natural (120 cm), es una colección privada del municipio cordobés de Villanueva de Córdoba.

Alfonso Castellano Tamarit es un artista de 23 años, discípulo del imaginero cordobés Francisco Romero Zafra, que pese a su juventud ha realizado numerosas tallas sacras de variada iconografía (Dolorosas, Niños Jesús, Cristo Cautivo, Divina Pastora, etcétera) para el culto particular y ahora se enfrenta a su encargo más importante con la ejecución de un grupo de misterio para la villa jiennense de Baeza; en concreto, las efigies de un soldado romano y un sayón que se estrenarán este año, y otra figura más para el año que viene.

La Dolorosa, que ha recibido la clásica advocación de Virgen de los Dolores, adeuda la estética del maestro tanto en la idealización del modelo como en el esmero a la hora de aplicar las carnaciones. De gran frontalidad y manos extendidas para portar los atributos propios de este tipo de simulacros, posee grandes ojos claros de acuosa mirada, rasgos aniñados y labios carnosos, elementos comunes en la plástica cordobesa de los últimos años que tantos adeptos ha logrado entre los amantes de la escultura sacra.

Si pulsan en la imagen que aparece a su izquierda, accederán a varias fotografías más de la pieza. Próximamente, les presentaremos nuevas creaciones realizadas por este joven imaginero.

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