El Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM) inaugura hoy la exposición titulada Arte y Espiritualidad, que reunirá esculturas, retablos, pinturas, proyecciones y cerámica, de distintos autores y artistas contemporáneos. La muestra se celebra, además, en el Año de la Fe, convocado por el papa Benedicto XVI.

La exposición incluye obras de Carmen Calvo, Miquel Navarro, Antoni Tàpies, Martín Chirino, Gerardo Rueda y José Cosme, entre otros artistas, y cuenta con piezas procedentes de museos valencianos: IVAM (colección permanente), Museo de Bellas Artes de Valencia, Museo Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias González Martí, Museo Catedralicio e Iglesia del Temple, así como otras obras con distintos artistas representativos del arte clásico y contemporáneo que intervinieron en el proyecto Siglo XXI: Arte en la Catedral de Burgos.

Arte y Espiritualidad es "una muestra plástica multidisciplinar que hace que las estéticas se unan a vivir este acontecimiento de gracia para la humanidad", según ha manifestado el sacerdote valenciano José Luis Sánchez, uno de los comisarios de la exposición.

La muestra quedará ubicada en tres salas, dos de ellas dedicadas a la historias de la fe cristiana, comenzando con el signo de la cruz y terminando con tres caminos: el de san Vicente, el de la Eucaristía y el del Calvario, y la tercera en la Sala de la Muralla, en la que expondrá el valenciano José Cosme, doctor en Bellas Artes y profesor de Teología en la Universidad Católica de Valencia, con su obra Ser y Huella.

Ser y Huella es una instalación inédita que dialoga con el espacio en la Sala de la Muralla, en la que el artista plantea una propuesta de arte conceptual teológico. Recorre un itinerario de reflexión sobre la visión antropológica y ontológica del hombre y la salvación. En ella reúne obras inéditas y piezas pertenecientes a colecciones particulares, que evocan sus trabajos realizados desde su primera exposición "teológica" en Londres en el año 1999. Su obra se mueve entre el arte conceptual en interacción con la teología.

Entre la abstracción y el simbolismo figurativo, José Cosme define su obra como "arte teológico" y encuentra entre sus referentes en la contemporaneidad artistas como Joseph Beuys, a quien considera "un gran desconocido como artista espiritual y que la crítica ha escondido el sentido de sus últimas obras profundamente cristiano y lo ha reducido a un activismo social".

La singular propuesta del artista José Cosme parte de la antropología teológica, del hombre tridimensional: físico, intelectual y religioso, que es "capax Dei". En esta ocasión traza un recorrido desde el génesis de la vida y del hombre, desde la biología distinguiendo lo biográfico expresamente. Como Instalación multidisciplinar combina técnicas y materiales diversos como objetos, telas, impresiones digitales, fotografía y videoarte, la luz y el lienzo sin embastar son elementos recurrentes en su obra.

La exposición incorpora la muralla como parte de la misma, la vemos iluminada por proyecciones que jalonan el recorrido y hablan sobre el génesis y la evolución hacia la redención y plenitud de la humanidad. Agrupa conceptualmente las obras expuestas en siete "Itinerarios" bajo los siguientes epígrafes de reflexión:

Génesis
En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y creó al hombre "In statu viae", hacia una perfección todavía por alcanzar. La proyección sobre la muralla de la mano de Dios creador nos adentra entre las nubes a una reflexión más allá de lo iconográfico, las manos de un Dios creador que a la vez evocan lo que serán las llagas de redención. Dios desde la creación asume a su criatura libre pero nunca se desentenderá de ella. Las llagas luminosas nos hacen pensar que son de donde emanan por amor toda la realidad y a donde el ser humano siempre puede recurrir para ser creado nuevamente. El texto, lo revelado y transmitido por la tradición es también un génesis en el conocimiento del ser humano.

Pecado
Donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia. Obras que usan la manzana como signo bíblico y el evangelio como contrapunto al pecado cometido. El pecado es visto frente la realidad de la gracia que lo supera. Un videoarte ilustra la acción que introduce el mal y se multiplica en el texto de la creación.

Redención
La persona de Cristo se transforma en un bautismo permanente para la humanidad. Las imágenes de Cristo y la Virgen se transforman en un agua redentora.

Nihilismo o trascendencia
El ser humano se pregunta si su vida y su huella tienen sentido. Pero un óleo blanco le atraviesa. Cada uno de estos itinerarios converge en el espacio central de la exposición donde la instalación "nihilismo o trascendencia", ilustra la visión del hombre y su ser histórico mediante lienzos blancos cruzados verticalmente por caminos de tela con huellas humanas y con un centro de óleo blanco. Las telas cuelgan de los cuadros, cruzan el espacio y se extienden por el suelo de forma que el público pueda interaccionar. Es una forma de evocar al espectador el sentido de ser-huella y que se identifique como parte de ese concepto de ser humano que se encuentra representado en los cuadros, una huella que puede considerarse a veces una marca de suciedad o un elemento efímero y sin sentido, pero que es cruzado por un óleo blanco que representa el sentido de Cristo, (signo visible) de redención y salvación. La instalación central compuesta por una Biblia Blanca de la que emergen telas plásticas como un fluir de luz. Frente a la instalación sobre el final de la muralla la proyección Camuflaje o Salvación, que cuestiona el sentido de lo que son las cosas o lo que parecen y que nos enfrenta a la realidad de la cruz en el mundo como visión que aparenta fracaso pero que en verdad es salvación.

Huella y Materia
La materia adquiere un nuevo sentido. Las obras que trazan el dibujo con texturas de arpillera y pinturas monocromáticas, figuraciones y abstracciones del ser, arena que se transforma en cruz, y cruz que se transforma en agua, todo forma parte de una transformación de la materia, y una visión tridimensional del ser humano.

Salvación
El Universo transcendiendo. La cruz y el universo, muestran un Universo llamado a la Salvación, en una situación de redención todavía escondida o camuflada para algunos, pero presente y revelada en nuestro mundo.

Participación
La interacción del arte con la realidad es la esencia de una creación que forma parte de la vida. El final de la exposición plantea dos resultados que deben emerger del diálogo con las obras, de nuestra reflexión. Uno es la acción ante la vida, el otro es la mirada esperanzadora que deja nuestras dudas e incapacidades suspendidas en oraciones de fe. Dos videos muestran intervenciones históricas donde pretende acercar la propuesta artística a la realidad, la reflexión teológica queda incompleta sin una involucración personal, sin la acción. Para finalizar, dos obras aparecen intervenidas con trozos de tela blancos que representan preces, sueños u oraciones abiertas al diálogo con Dios. Una obra acoge las pequeñas telas entre las sabanas como un cielo de nubes, la otra en la imagen de la muralla de la misma sala aparecen la telas blancas como una presencia permanente ante Dios.

Arte y Espiritualidad ofrece un recorrido artístico que solemniza el diálogo entre clasicismo y contemporaneidad acerca de la espiritualidad que durante tantos siglos han llevado a cabo los artistas y que; tal y como se refleja en las diez secciones que albergan la muestra, recapitula, desde un prisma novedoso, las iconografías inherentes a esta temática. Este discurso expositivo que se inicia en la Galería 4 se divide en las siguientes secciones:

La Señal de la Cruz
Iniciamos un camino artístico espiritual por medio de la cruz, signo universal por excelencia y uno de los elementos que mayor protagonismo ha adquirido en la iconografía religiosa y que mayor representatividad ha tenido en la historia del arte universal al representar la unión de conceptos que oscilan entre lo divino y lo terrenal.

Crucifixión y Muerte
Artistas de distintas generaciones dibujan, modelan, reinterpretan, despojan y nutren de nuevos significados a la crucifixión, realzando su contraste con lecturas del pasado siempre contemplando su dimensión transformadora.

Infierno
En esta morada en llamas, la angustia y el tormento se concentran en las distintas escenografías que entroncan la tradición artística más clasicista con alusiones a la ciencia-ficción que, desde la contemporaneidad, reinterpretan la idea del infierno a partir de la creación de un juego de contrastes visuales. Sin que ello reste nada a la idea teológica de la eternidad sin Dios.

Cielo
Una representación de plenitud que se necesita para completarnos. Un escenario celestial que ha quedado ampliamente integrado en nuestra cultura tal y como observamos en las proyecciones audiovisuales y la reproducción de los frescos que Palomino realizó en los techos de la Iglesia de los Santos Juanes y de la Basílica de la Virgen de los Desamparados.

Arquitectura Religiosa
La arquitectura religiosa es el espacio que nos ayuda al encuentro con la belleza plena y transforma en lugar sacro el espacio favoreciendo el encuentro. Una arquitectura sagrada sobre la que un grupo de artistas modernos y contemporáneos seducidos por la espiritualidad arquitectónica elaboran distintas reflexiones artísticas de edificios religiosos.

En la Galería 3 continua el recorrido expositivo a través de:

Las Campanas y Misterios del Rosario
En esta parte del camino atendemos a la llamada a la oración, a la acción de gracias, al gozo con la que la Iglesia convoca a la asamblea del pueblo y a sus fieles, para celebrar los actos de la liturgia o vivir la oración sencilla de contemplación de los misterios.

Santos y Ascetas
Tanto en el arte clásico como en el contemporáneo se ha reproducido la belleza de todos los hombres y mujeres distinguidos por la heroicidad de sus vidas identificadas como un signo del encuentro con lo trascendente incidiendo en la importancia que la libertad interior posee.

María
Su figura ha quedado históricamente exaltada como paradigma de la intercesión. Con una mirada puesta en el pasado y otra en el presente contemplamos una serie de representaciones artísticas que coinciden en evocar que su verdadero protagonismo radica en su humildad.

El Retablo
Ha sido un elemento de transmisión de conocimiento que, como biografía de la salvación, se ha erigido en un elemento de comunicación y de narración de la existencia divina de gran significación.

El Camino
Diferentes itinerarios y caminos se entrecruzan en esta sala: el camino de San Vicente Mártir, el del Santo Cáliz de la cena del Señor y el del Calvario que con distintos lenguajes artísticos indican el camino de la Fe.