El Museo Nacional de Escultura (MNE) incorpora a sus colecciones una talla de la Virgen del Carmen del escultor e imaginero valenciano José Esteve y Bonet que fue adquirida por el Ministerio de Cultura en la subasta de pintura antigua y artes decorativas celebrada el pasado 24 de septiembre por la Casa Ansorena de Madrid.

La obra es de madera tallada, policromada y dorada para vestir, con tejidos de seda bordados y joyas realizadas con oro, plata y gemas. Mide 86 cm de altura (100 cm con la corona).

José Esteve Bonet (Valencia, 1741-1802) fue una de las figuras más relevantes de la escultura valenciana del siglo XVIII. Director de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos de Valencia desde 1776, realizó varios viajes a la Corte y fue nombrado escultor de cámara honorario del rey Carlos IV. La imagen de vestir que aquí se muestra, presenta una serie de características formales en la fisonomía del rostro de las figuras, los volúmenes de la anatomía y el modelado de los cabellos que permiten atribuirlos al escultor valenciano.

Tipológicamente, presenta numerosos paralelismos técnicos y formales con otra pieza sobre el tema de Esteve y Bonet, también de vestir y conocida gracias a algunas fotografías: la Virgen del Carmen de vestir que presidía el retablo mayor del convento de carmelitas del municipio albaceteño de Caudete, realizada en 1763 y desaparecida en la Guerra Civil. Ambas piezas muestran un modelo mariano sereno, dulce y con cierto aire clasicista, de ojos almendrados, cejas finas y suave mentón. El Niño Jesús es prácticamente idéntico en sus facciones y cabellos y en la postura cruzada de las piernas.

A diferencia de la imagen de Caudete, el Carmen del MNE con sede en Valladolid presenta una rica base con decoración polícroma que imita el mármol y una banda de laurel dorada.

La estructura de madera de esta pieza vestidera reposa sobre el tradicional cúmulo de nubes plateado, típico en la producción de Esteve y Bonet, en el que aparecen revoloteando cuatro ángeles de gran expresividad. Algunos de ellos presentan faltas y deterioros.

El vestido, espolín valenciano del siglo XVIII, se encuentra ricamente confeccionado con seda natural y metal (oro y plata), presentando ricos bordados, una elegante y discreta decoración de motivos florales en la túnica de la Virgen y de elementos geométricos en el manto o capa. Sobre el escapulario del hábito luce una joya de lazo, aderezo y una cruz de perlas de agua dulce rematada por una corona. La decoración se completa con diferentes anillos, pendientes, una diadema que hace la función de rostrillo sobre la frente y la corona realizada en plata. Tanto el Niño como la Virgen, portan sendos escapularios devocionales que combinan sus propios anagramas con el escudo del Carmen Descalzo.

Gracias a su Libro de la Verdad sabemos que Esteve y Bonet realizó varias imágenes de vestir de la Virgen del Carmen. Una de ellas, entregada el 8 de julio de 1768 a una mujer dedicada a la venta de carbón que residía en la calle San Vicente de Valencia, coincide en sus medidas con la que aquí se muestra. Según el documento medía cuatro palmos de altura, unas medidas casi idénticas a las de esta pieza.

Entre las actividades previstas por el Museo Nacional de Escultura para noviembre se encuentra una visita temática el viernes 22, a las 18:00 horas (con un servicio de interpretación en Lengua de Signos Española), en la que, con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el MNE invita a conocer sus esculturas de mujeres mártires, pecadoras, santas y arrepentidas.

Destacar nuevamente la inauguración de la exposición Luisa Roldán. Escultora real, que podrá ser visitada del 29 de noviembre de 2024 al 9 de marzo de 2025. Una muestra que permitirá al público visitante adentrarse en una vida apasionante, pues la escultora e imaginera sevillana aunó excelencia, versatilidad y habilidad para romper las barreras de género y llegar a lo más alto como artista.