Hoy se bendice en la localidad costera de Benicarló (Castellón) esta imagen de Jesús Caído, la primera talla cristífera que el escultor cordobés realiza para llevar peluca. Un Nazareno a tamaño natural en madera de cedro, completamente anatomizado y policromado a la técnica del óleo, aunque va revestido con túnica.

La imagen ha sido presentada en el Edificio Gótico (antiguo Ayuntamiento benicarlando), con motivo de la XXIII Exposición de Motivos de Semana Santa que se inauguró ayer. Posee un gran potencial dramático, no solo en el gesto que suplica fuerzas para levantarse del afilado risco, sino también en unas carnes abiertas que, pese a las ropas, quedan a la vista en la espalda, los hombros y la rodilla que toca el suelo.

Al igual que la cabellera, confeccionada por Dioni Barrera, las pestañas superiores del Cristo son de pelo natural. Respecto a los atributos, la corona de espinas en plata de ley ha sido cincelada por Daniel Porras, la cruz, de sección cepillada y rectangular, es de Pedro García (La Rambla), y la ropa, de Antonio Villar.

Por último, comentarles que Romero Zafra, actualmente terminando dos angelitos para el paso de misterio de la hermandad cordobesa de la Merced -los cuales harán pareja con otros dos de Francisco Buiza que el artista ha donado a dicha corporación-, va a exponer el Despojado presentado en La Hornacina el pasado 7 de marzo, en un escaparate cofrade del Hotel NH de Granada, donde permanecerá durante toda la Semana Santa.