Con esta escultura de San Juan Evangelista, de talla completa, se completa el grupo iniciado por el artista en 2014 con la imagen del Ecce Homo, y continuado con la Dolorosa de la Consolación cuatro años más tarde. Ambas figuras fueron presentadas en La Hornacina el 20 de diciembre de 2014 y el 2 de octubre de 2018, respectivamente. Recordemos que, en un principio, el conjunto fue labrado por Romero Zafra como un proyecto personal sin destino, siendo finalmente comprado y promovido por un sacerdote de Valladolid.

Al igual que el Ecce Homo y la Dolorosa, la talla de San Juan es de tamaño natural (mide 175 cm de altura), labrada en madera de cedro real y policromada mediante la técnica del óleo. En la ejecución del santo han intervenido Pablo Porras y Juan Jiménez, discípulos de Romero Zafra, quienes se han encargado de llevar a la madera y policromar el modelo en barro llevado a cabo por el famoso creador cordobés.

Las figuras de María y Juan flanquean a Cristo procurándole consuelo, como si de un Stabat Mater se tratara, solo que Jesús toma la forma de Ecce Homo y no de Crucificado, como suele ser habitual, y el monte Calvario se convierte en el pretorio donde tuvo lugar la Presentación al Pueblo, tomando así la escena un cariz alegórico. El autor vuelve a usar un dinamismo basado en las diagonales, llevando el Discípulo Amado ampulosos ropajes con los tonos verdes y rojos propios de su iconografía, cuyas vueltas tienen pigmentos ocres y dorados.