LA OBRA DE MANUEL JUAN CARRILLO MARCO (I)
ENTRADA EN JERUSALÉN - CIEZA

Joaquín Caballero Segura


 

El próximo mes de noviembre se celebrará en Cieza el XX aniversario
del fallecimiento de Manuel Juan Carrillo Marco, el más
destacado imaginero contemporáneo de la localidad murciana

 

 

La Cofradía de la Oración del Huerto y Santo Sepulcro, los populares Dormis de Cieza, encargan en 1948 al maestro Carrillo este grupo para procesionar en la mañana del Domingo de Ramos, estando terminado en el año 1950.

La Entrada de Jesús en Jerusalén representa el primer momento más importante de la Pasión, cuando Jesús triunfal es aclamado con palmas y ramas de olivos. En Cieza se conoce este majestuoso conjunto procesional como "La Burrica". Está formado por tres imágenes: Jesús montando sobre un asno y acompañado de un pollino, y el círculo amistoso de Santiago y San Juan, dos de los apóstoles con mayor importancia dentro de los episodios bíblicos.

"Cuando se acercaban a Jerusalén, junto a Betfagé y a Betania, frente al monte de los Olivos, Jesús envió dos de sus discípulos, y les dijo: entren a la aldea que está enfrente de nosotros, y luego que entrés en ella, hallaras un potro atado, en el cual ningún hombre ha montado; desatadlo y traedlo. Y si alguien os dijere: ¿Por qué hacés eso? decir que el Señor lo necesita, y que luego lo devolverá. Fueron, y hallaron el potro atado afuera a la puerta, en el recodo del camino, y lo desataron. Y unos de los que estaban ahi les dijeron: ¿Qué hacen desatando el potro? Ellos entonces les dijeron como Jesús había mandado; y los dejaron. Y trajeron el potro a Jesús, y echaron sobre él sus mantos, y se sentó sobre él. También muchos tendían sus mantos por el camino, y otros cortaban ramas de los árboles, y las tendían por el camino. Y los que iban delante y los que venían detrás daban voces, diciendo: ¡Hosanna! ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor! ¡Bendito el reino de nuestro padre David que viene! ¡Hosanna en las alturas! Y entró Jesús en Jerusalén, y en el templo; y habiendo mirado alrededor todas las cosas, como ya anochecía, se fue a Betania con los doce". (Marcos 11, 1-11).

Jesús se nos presenta con rostro de gran serenidad, pensativo en todo lo que sucederá días más tarde. Aun así, es un Cristo de auténtica majestad, montado sobre el asno a galope, sujetando las bridas con la mano izquierda, mientras con la derecha bendice al pueblo.

La figura de la burra es magnifica, adelantando la pata derecha para seguir el camino que ha de tomar Jesús. La elegancia con la que el maestro Carrillo Marco realizó la figura de la popular Burrica pone de manifiesto la gran seguridad que demuestra el escultor al desenvolverse con la gubia.

En el lado inferior de la escena nos encontramos a Juan y Santiago, éste último acompañado de un pequeño borrico. Son imágenes distintas en su concepción, ya que mientras la primera muestra unos rasgos suaves, evocando la juventud característica de este apóstol en la Pasión, Santiago aparece con un temperamento más maduro, serio e imponente. Hay que destacar también el curioso dialogo que se establece entre ambas imágenes.

 



La ejecución de la obra, realizada en madera de pino, es espléndida. En sus imágenes, Manuel Juan Carrillo Marco domina la técnica del modelado y del buen acabado, con ropajes huecos y de pliegues cóncavos adheridos a la piel. Igualmente, tenemos que mencionar la gran ejecución en el dibujo que realiza el maestro ciezano, con ricas estofas en las vestiduras de los apóstoles.

 

Fotografías de Roque Belda

 

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