País: Cuba.

Año: 1962.

Duración: 94 m.

Género: Comedia negra.

Director: Tomás Gutiérrez Alea.

Intérpretes: Reynaldo Miravalles, Enrique Santiesteban, René Sánchez, Idalberto Delgado.

Comentario: Una rica moribunda se niega a donar su patrimonio al colectivo impuesto por el reciente orden socialista de Cuba y decide esconder sus joyas en las doce sillas de un juego de comedor. Su avaricioso sobrino se entera de esto después de la muerte de su tía, cuando todo ha sido nacionalizado por el Ministerio, y con la ayuda de un antiguo empleado comienza el rastreo de las sillas a lo largo de toda la isla.

La Escena: Además del sobrino, un antiguo propietario venido a menos, se suma a la búsqueda un sacerdote, que mezcla su codicia con el anticomunismo y que, con tal de lograr su objetivo, es capaz de participar activamente en ceremonias de la religión afrocubana y hasta de engañar a los fieles, con el pretexto de que las sillas serían utilizadas en una representación de la Última Cena de Cristo.

Curiosidades: Aunque en líneas generales se trata de una crítica a la burguesía cubana y su apego a un pasado que no acepta los cambios producidos durante los inicios de la Revolución, vemos también cierta sátira hacia el nuevo régimen que recuerda los rodajes de Berlanga en el franquismo. Basada en una novela de los humoristas rusos Iliá Ilf y Yevgeni Petrov, fue además una de las primeras comedias del Nuevo Cine Cubano.