MANUEL ECHEGOYAN


 

 

Nacido en Espartinas (Sevilla) en 1905, Manuel Echegoyan fue una de las más firmes promesas de la escultura de su tiempo. En su época de aprendiz trabajó en el taller del escultor sevillano José Ordóñez, quien tenía el encargo de continuar con el trabajo de escultura en la fachada plateresca del Consistorio Hispalense.

De entre las primeras obras de Echegoyan podemos destacar el monumento al político Emilio Castelar, ubicado en los Jardines del Cristina (Sevilla), obra del año 1926 que le valdría al artista una beca de la Diputación Provincial de Sevilla para estudiar en París.

Con 25 años se marchó a Madrid para examinarse de la oposición de profesor titular de Artes y Oficios. Pero tan maravilloso futuro pronto se vio truncado por el estallido de la Guerra Civil, en la que luchó en el bando republicano. Al finalizar la guerra, con la rendición de la capital de España, fue hecho prisionero. Meses más tarde, fue liberado aunque inhabilitado para ejercer.

En 1944 fue revisado su caso, y tras volver a ser juzgado, le fue impuesta e Echegoyan una multa de 250 pesetas. Pero la vida profesional del escultor quedaría resentida para siempre. No fue hasta el año 1952 cuando por fin consiguiera reincorporarse a la vida docente.

 

 

 

Casado con la pintora Emilia Pereira, a lo largo de su vida se presentó a diferentes certámenes como la Exposición Nacional de Bellas Artes, en la década de 1950, donde obtuvo sendas medallas de plata y bronce. Así mismo, recibió el Primer Premio de Escultura del Ayuntamiento de Sevilla en 1959.

Como principales obras del escultor podemos resaltar el monumento al doctor Leal Castaño en su Espartinas natal, el monumento conmemorativo del centenario de la Junta de Obras del Puerto, los medallones de la fachada plateresca del Ayuntamiento de Sevilla, en los que se esculpió él mismo junto a su esposa, o los relieves de la Escuela de Artes Aplicadas de Nervión. Todo ello realizado seguramente en el taller que tenía en propiedad en la sevillana calle de Antonio Susillo, en funcionamiento hasta su muerte en 1984.

No podemos olvidar destacar que, en el año 1965, Manuel Echegoyan fue elegido académico numerario de Bellas Artes y de Santa Isabel de Hungría.

Con motivo del centenario de su nacimiento, Sevilla le recordó con una exposición de su obra, y dos conferencias en los Reales Alcázares. La muestra recogió su evolución desde el figurativismo hasta sus incursiones en la vanguardia. En el año 2010, en el extinto Centro Didáctico de la Imaginería de Espartinas, su figura fue uno de los principales objetivos de una exposición que recogió creaciones no expuestas al público hasta la fecha.

 

 

FUENTES

AA.VV. Espartinas. Historia. Arte. Religiosidad Popular, Ediciones del Ayuntamiento de Espartinas (Sevilla), año 2006, pp. 437-438.

 

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