Con motivo de la exposición Cor Iesu del Monasterio de Santa Clara de Moguer (ver enlace) se exhibe por primera vez al público una obra hasta ahora desconocida del célebre escultor e imaginero Sebastián Santos Rojas (Higuera de la Sierra, Huelva, 1895 - Sevilla, 1977). Hablamos de una pequeña escultura (mide unos 50 cm de altura) modelada en barro cocido y policromado al óleo, con partes doradas, que representa al Sagrado Corazón de Jesús, una popular iconografía de Cristo en torno a la cual gira la mencionada muestra.

Aunque el simulacro es muy característico de la devoción doméstica, según los comisarios de la exposición, Juan Manuel Moreno Orta y Juan Bautista Quintero Cartes, esta obra podría tratarse del boceto en terracota de un monumento al Sagrado Corazón de Jesús que no llegó a realizarse. La pieza es propiedad de un coleccionista privado de Higuera de la Sierra (Huelva), localidad natal de Sebastián Santos, por lo que quizás dicho municipio sería el destino de la presunta escultura urbana que, finalmente, no se materializó.

La presente estatuilla se ajusta a la evolución iconográfica del modelo surgido tras la visión de la santa de Alacoque: en vez de abrirse la túnica con las manos para mostrar el corazón inflamado sobre el pecho, ahora baja la mano izquierda y voltea su palma para mostrar la llaga de la crucifixión, mientras la derecha sigue arriba señalando al corazón. El modelado es suave, fino y exquisito, típico de Santos, que opta por no decorar los ropajes verdes, rojos y crudos, reservando el dorado para las orillas y la cruz y las llamas del corazón.