Presentación

La Sala Municipal de Exposiciones de Las Francesas-Fundación Municipal de Cultura inaugura la muestra Vita Christi, un recorrido por las exposiciones que comisarió el historiador Alejandro Rebollo para la Junta de Cofradías de Semana Santa de Valladolid entre 2015 y 2019 a través de algunas de las piezas más valiosas y singulares que el historiador localizó y seleccionó para las mismas.

Vita Christi se concibe, precisamente, como un homenaje al historiador Alejandro Rebollo, quien falleció en agosto del año 2019. Se materializa, así, una idea que comenzó a gestarse después de su pérdida y que se vio pospuesta por la pandemia de la COVID-19.

La concejala de Cultura y Turismo, Ana Redondo, ha presidido esta mañana la apertura inaugural de esta muestra. Junto a la edil han participado en el acto la comisaria de la muestra, Blanca Mateo Urdiales; el profesor de Historia Moderna y colaborador en la organización de la misma, Javier Burrieza; el presidente la Junta de Cofradías de Semana Santa, Isaías Martínez Iglesias; y familiares de Alejandro Rebollo.

La exposición podrá visitarse hasta el próximo 11 de abril. Coincide, así, con el periodo de la Semana Santa, de modo que Vita Christi se presenta como un complemento a los actos de la Semana de Pasión. El horario actual (adaptado a la normativa regional que regula los horarios de cierre de centros culturales) es de martes a domingo, de 12:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00 horas. La entrada es gratuita.

El título de la muestra hace referencia al texto escrito en el siglo XIV por el monje Ludolfo de Sajonia, conocido popularmente como "El Cartujano". "Vita Christi" ("Vida de Cristo") fue una obra de especial relevancia en la iconografía cristiana de Occidente en los siglos posteriores y marca el inicio de una etapa de influencia de las letras en la renovación espiritual que experimenta Europa en los siglos XV y XVI.

Con este texto como hilo argumental, la historiadora Blanca Mateo, con la colaboración de Javier Burrieza, ha diseñado un recorrido con algunas de las obras que Alejandro Rebollo seleccionó para las exposiciones que comisarió como colaborador de la JCSS en la última etapa de su vida: "Signa Christi" (2015), "Nazarenus" (2016), "Vera Icon" (2017), "Stabat Mater" (2018) y "Ecce Homo" (2019). Todas ellas pudieron verse en Salas Municipales de Exposiciones del Ayuntamiento de Valladolid.

En Vita Christi pueden verse más de medio centenar de esculturas, pinturas o grabados, representación de más de cinco siglos de arte sacro. Aunque la selección cuenta con un importante peso de obras de los siglos XVI y XVII, el recorrido se adentra en el siglo XV -con una escultura de Alejo de Vahía- y camina hacia los siglos posteriores hasta llegar hasta el XXI -un grabado de Santiago Bellido realizado en el año 2015 es la pieza más actual de la exposición-. El visitante encontrará esculturas en madera policromada de los principales representantes de la imaginería: Gregorio Fernández (autor de un Cristo atado a la columna y un Cristo crucificado que se exponen estos días), Juan de Juni (se puede ver uno de sus Ecce Homo) o Pedro de Ávila (con un busto de la Dolorosa), entre otros. Junto a ellos se expone una de las piezas más singulares localizada por Bellido, una talla de un Cristo hispano-filipino realizada por un autor chino no identificado. En cuanto a la pintura, se exhiben óleos del pintor flamenco Frans Francken II, de Simon de Vos, de los artistas barrocos Francisco Camilo o Diego Valentín Díaz, o de autores adscritos a la Escuela de Amberes.

Todas estas piezas de arte sacro se organizan en capítulos temáticos: "Una imagen de Cristo muy devoto", muestra de una espiritualidad de cercanía que recuerda las palabras de Santa Teresa de Jesús; "La mirada de Cristo", que traza un recorrido por la vida de Jesús; e "Historia de La Pasión", inspirado en los momentos esenciales de las meditaciones de autores como Luis de Granada o La Puente. Esta recopilación, recorrido por la espiritualidad cristiana de Occidente, pero también por la Historia del Arte de los últimos cinco siglos, se completa con una selección de una decena de libros, que van desde un ejemplar del "Vita Christi" de 1580 hasta obras de Fray Luis de León, Fray Luis de Granada o Luis de la Puente.

La exposición Vita Christi está organizada por la Junta de Cofradías de Semana Santa de Valladolid y el Ayuntamiento de la ciudad, con la colaboración de la Junta de Castilla y León.

Las piezas expuestas proceden de los centros Santa Iglesia Catedral Metropolitana y Museo Diocesano y Catedralicio, Seminario Mayor Diocesano, Iglesia-Oratorio de San Felipe Neri, Real Colegio de Ingleses de San Albano, Museo Real Monasterio de San Joaquín y Santa Ana, Monasterio de las Descalzas Reales, Monasterio del Corpus Cristi, Monasterio de Sta. María Real de Huelgas, Monasterio de Santa Isabel de Hungría, Monasterio de la Concepción del Carmen Monasterio de Sancti Spiritus, Monasterio de Jesús y María, Monasterio de la Visitación (Salesas), Monasterio de Portacoeli (Calderonas), Monasterio de Huelgas Reales-San Quirce, Cofradía Penitencial de la Sagrada Pasión, Cofradía Penitencial de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Cofradía Penitencial de Nuestra Señora de las Angustias, Parroquia de Santiago Apóstol, Parroquia de San Lorenzo, Parroquia de la Asunción (Geria, Valladolid), Parroquia del Santísimo Salvador (Simancas, Valladolid), Santuario del Carmen Extramuros, Real iglesia de San Miguel y San Julián, Santuario Nacional de la Gran Promesa, Parroquia de San Andrés Apóstol, Parroquia de San Ildefonso y Museo de la Universidad de Valladolid. Presta obra, también, el citado artista Santiago Bellido de su colección particular.

Sobre Alejandro Rebollo

Alejandro Rebollo Matías, doctor en Historia del Arte, investigador y conservador del patrimonio y colaborador de la Junta de Cofradías de la Semana Santa de Valladolid, fue responsable del comisariado de las últimas exposiciones de esta entidad. Al frente de las mismas estuvo desde 2015 y hasta 2019, meses antes de su fallecimiento el 13 de agosto. A través de la presente muestra se quiere recordar su intensa labor didáctica y divulgativa, presente en todas las exposiciones que diseñaba; además de su dedicación.

Quienes lo conocieron recuerdan que era habitual verle volcado durante meses en una labor de investigación y de búsqueda, para encontrar y exponer las piezas más singulares, y de estructuración de la muestra, en cuyo guion, estudiado y elaborado con minucioso cuidado y detalle, se mezclaban los contenidos históricos, artísticos, patrimoniales, espirituales y teológicos. Todo ello se reflejaba en los propios títulos de estas muestras, todas mencionadas anteriormente, acompañadas de sus explicaciones y un catálogo convenientemente coordinado. En ellas realizó un perfecto ensamblaje entre historia, arte, patrimonio y espiritualidad, un equilibrio que ahora quiere recuperar la exposición Vita Christi como homenaje a Alejandro Rebollo.

Para homenajearle por los muchos frutos que pensó, hizo nacer y desarrolló, desde una concepción profunda de su formación y de su trabajo como historiador del arte, era necesario culminar una nueva exposición que recordase algunas de las piezas de mayor calidad y singularidad que Alejandro Rebollo reunió, descubrió y analizó en las muestras que diseñó.

El título casi ha nacido sin querer, Vita Christi ("Vida de Cristo"), recordando, como hemos dicho antes, una de las obras más importantes de la historia de la espiritualidad. Son las páginas de Ludolfo de Sajonia, fallecido en 1377 antes de la invención de la imprenta. Era el título más adecuado para reunir el camino que Cristo ha jugado en la historia del arte pero también en la historia de las percepciones, especialmente de su Pasión, Muerte y Resurrección, coordenadas esenciales para definir la celebración de la Semana Santa, tan desarrollada en la ciudad de Valladolid, y en las tierras de Castilla y León en general.

Fueron páginas esenciales para entender una corriente de espiritualidad interior denominada "Devotio Moderna, tan presente en el proceso de renovación protagonizado por las reformas religiosas de los siglos XV y XVI. Pero también "Vita Christi" fue uno de los títulos que leyó Iñigo de Loyola -futuro San Ignacio de Loyola, fundador de la Compañía de Jesús-, junto con el "Flos sanctorum", en su proceso de convalecencia tras haber sido herido en la defensa de la fortaleza de Pamplona y en vísperas de lo que se ha conocido como el proceso de su "conversión" y de la elaboración de los conocidos Ejercicios Espirituales, hace ahora 500 años. 

Letras para la devoción

Todos los ejemplares de libros expuestos en este capítulo proceden de la Biblioteca del Real Colegio de los Ingleses de San Albano, excepto la Sagrada Biblia ilustrada, aportada por el Seminario Diocesano.

Entre las piezas de arte expuestas en este primer capítulo de la muestra destacan la "Virgen Dolorosa" del pintor Francisco Camilo (imagen superior), una obra del segundo tercio del siglo XVII que pertenece al patrimonio del colegio vallisoletano de los Ingleses de San Albano, y una singular representación pictórica titulada "Cristo sacerdote según el rito de Melquisedec", de autor anónimo, también del siglo XVII, conservada en el monasterio vallisoletano de Nuestra Señora de Porta Coeli (Madres Dominicas).

Una imagen de Cristo muy devoto

Este capítulo de la exposición se inspira en las palabras de Santa Teresa de Ávila: "Acaeciome que, entrando un día en el oratorio, vi una imagen que habían traído allá, que se había buscado para cierta fiesta que se hacía en casa. Era de Cristo muy llagado y tan devota que, en mirándola, toda me turbó de verle tal, porque representaba bien lo que pasó por nosotros". Representa una espiritualidad de cercanía que tanta huella dejó en la iconografía del Ecce Homo, como Cristo sufriente, pero también en otros momentos en los que medita sobre su final, sobre su misión redentora, incluso desde su infancia.

Piezas tanto pictóricas como escultóricas se exhiben en esta sección sobre la iconografía del Ecce Homo, destacando la del escultor Juan de Juni (imagen superior), realizada en torno a 1545 en madera de nogal tallada y policromada, propiedad del Museo Diocesano y Catedralicio de Valladolid. Otras piezas destacadas son la Dolorosa del escultor Pedro de Ávila (hacia 1718-1721), conservada en el monasterio vallisoletano del Santísimo Salvador de Santa Brígida, o el Niño Jesús con los Arma Christi en sus manos de los artistas napolitanos Aniello y Michele Perrone del monasterio vallisoletano de la Concepción del Carmen (Carmelitas Descalzas).

La mirada de Cristo

Esta sección parte del pequeño Niño Jesús del oratorio vallisoletano de San Felipe Neri, atribuido a Pedro de Ávila (primer tercio del siglo XVIII), que tenía su propia función y que siempre fue admirado por Alejandro Rebollo, para constituir un recorrido por la vida de Cristo.

Desde su nacimiento y su infancia, se pasa por una espiritualidad tan representativa en su tiempo como la del círculo del célebre pintor Luis de Morales el Divino, representado aquí en tres obras: "Ecce Homo" (imagen superior), "Piedad" y "Cristo con la cruz a cuestas"; por una mirada a la vida familiar, teniendo un buen ejemplo en la pintura "Muerte de San José" (1668) de Diego Díez de Ferreras; por su condición de Mesías en piezas como "El Buen Pastor" de José García Hidalgo (siglo XVII), del Real Colegio de los Ingleses de San Albano; o desde la iconografía del Cristo Atado a la Columna, representada en una de las piezas maestras de Gregorio Fernández; en concreto, la versión de 1615 del Monasterio de la Concepción del Carmen.

Historia de la Pasión

La continuación natural del anterior capítulo es llegar a la temática de la Pasión de Jesús, que aborda este último apartado de la muestra Vita Christi. Recorre los momentos esenciales de las meditaciones de Fray Luis de Granada o Luis de la Puente, y se acerca a los Evangelios como fuente principal de esta iconografía, aunque no la única como lo demuestran los capítulos anteriores de esta exposición.

Es en esta sección donde se puede contemplar el Cristo expirante hispano-filipino, anónimo chino de la segunda mitad del siglo XVII (Monasterio de la Concepción del Carmen), así como las obras apuntadas de Alejo de Vahía (Piedad con San Juan y María Magdalena en la imagen superior), Frans Francken II ("El paso del torrente Cedrón") y Simon de Vos ("La Sentencia" o "Ecce Homo"), entre otros autores.

Noticia relacionada en este