La obra titulada Señor de la Vida, realizada por el reconocido escultor e imaginero José María Leal Bernáldez (Sevilla, 1978), ha sido la escultura sacra preferida de los internautas del portal La Hornacina dentro de las presentadas en el mismo a lo largo del pasado año 2020.

Con un 38,5 % de los votos, esta talla es la que más respaldo ha tenido por parte del público a lo largo de las quince ediciones del certamen. Otra circunstancia inédita es que, por primera vez en su historia, el autor de la escultura galardonada repite premio, ya que la obra titulada "Señor Ultrajado en su Coronación de Espinas", realizada por José María Leal para Campillos (Málaga), fue la más votada en la XI edición del premio.

El Señor de la Vida es una representación de Cristo en su resurrección, encargada a Leal por la hermandad almeriense de Jesucristo Resucitado, Señor de la Vida, y María Santísima del Triunfo. Fue presentado y bendecido el 7 de marzo de 2020 en el templo parroquial de Nuestra Señora de Montserrat. La imagen toma como referente el famoso "Cristo Resucitado" de Jerónimo Hernández que se conserva en la iglesia sevillana de la Magdalena para encarnar a un triunfal Varón de Dolores cuya concepción es clásica a la vez que naturalista. Un Dios que es también hombre, a punto de ascender al cielo pero aún con los pies en la tierra, que sujeta en sus manos una gran cruz de orfebrería como símbolo de su victoria sobre la muerte.

La única obra que se ha quedado cerca de la más votada en cuanto a apoyo del público, con un 28,9 % de los votos, es la Virgen dolorosa titulada Madre de Dios de los Desamparados, del escultor cordobés Javier Cumplido, realizada para una colección particular de la ciudad de Granada.

A mayor distancia están el San Agustín (12 %) del escultor gaditano Daniel Herrera, un busto en terracota patinada en bronce que puede verse ahora en una exposición temporal del Museo de Chiclana de la Frontera; la imagen de Santa María Cleofás (6,5 %), del escultor sevillano Miguel Cordero Romero para la Hermandad de Santa María Magdalena del municipio murciano de Blanca, y el Cristo Yacente (3,2 %) del también sevillano Juan Manuel Montaño para la Hermandad del Nazareno de la localidad de Pinto (Madrid).

Tras ellas, las esculturas presentadas de los siguientes artistas, seis de ellos galardonados ya en ediciones anteriores, completan las veinticinco obras más votadas en esta última edición del premio: Arturo Serra, Galo Conesa -ambos con el mismo número de votos-, Jesús Cepeda, Rafael Martín Hernández, Jonathan Alonso, Mariano Sánchez del Pino, Fernando Aguado, Antonio López Ramírez, Guadalupe de Guzmán, Juan Bautista Jiménez, Alfonso Castellano, Antonio Parras, Francisco Javier López del Espino, Juan Vega, Ángel Pantoja, Ramón Cuenca Santo, Alberto Cámara, Abraham Ceada, Pedro García Velasco y los Hermanos Cava.

 

     
             
             
     
             
             
     
             
             
     
             
             
     
             
             
     

 

Desde la imagen del "Señor Ultrajado en su Coronación de Espinas" hasta el Señor de la Vida, el artista hispalense José María Leal Bernáldez ha realizado obras como "Nuestra Señora del Dulce Nombre" para Constantina (Sevilla), el "San Ginés de la Jara" que actualmente se exhibe en el Ayuntamiento de Sevilla, y dos crucificados con los títulos de "Cristo de la Expiración y del Espíritu Santo" y "Cristo de la Victoria" para Alicante y Málaga, respectivamente. Sus últimas obras han sido los "Padres de la Iglesia" y los "Evangelistas" para el remozado paso procesional del venerado "Cristo de la Expiración" (Cachorro) de Triana (Sevilla).

El autor demuestra con el Señor de la Vida un gran conocimiento de la anatomía humana a la hora de crear una obra ligada también al significado que el sol, el oro y el color amarillo tienen en la creación del mundo y la regeneración de los hombres. Es por ello que sus cabellos son claros, casi rubios, y que los atributos que aluden a su divinidad, cincelados en Sevilla por el taller de los Hermanos Fernández, refulgen con espejuelos para resaltar el halo centelleante y luminoso que rodea a Jesús como fuente de luz y vida eterna.

Dicha obra formará parte de un misterio que saldrá también de sus manos y estará compuesto por las figuras de María Magdalena, María Salomé y un ángel, que simbolizarán el "Noli me tangere", el fiel que quiere sentir físicamente a Cristo y la conexión de lo divino con lo humano, respectivamente.

José María Leal se convertirá por tanto en el primer escultor que recibirá por segunda vez de La Hornacina una placa como galardón en nombre de todos los internautas de la página web, hecho que se inscribirá en la misma junto con su nombre y el de la pieza ganadora. Ello se hará en una fecha de la que les mantendremos informados y que dependerá de las medidas sociosanitarias vigentes en el país, lo que también ha condicionado la entrega del premio de la XIV edición; que a falta por determinar fecha en función de las restricciones y los confinamientos perimetrales que se establezcan, tendrá lugar en cualquier caso con anterioridad.

Vaya nuestra más sincera enhorabuena al galardonado y al resto de los artistas, hayan sido o no seleccionadas finalmente sus obras, por tan magnífico nivel ofrecido durante 2020; un año de muchos proyectos de excelente factura pese a que, también por las consecuencias de la crisis mundial derivada de la pandemia, otros muchos, lamentablemente, hayan sido pospuestos o cancelados hasta nuevo aviso.

Y este año no solo queremos agradecer la excelente respuesta que hemos recibido nuevamente de parte de nuestros internautas, sino también la difusión dispensada por los compañeros de los medios de comunicación y las instituciones interesadas, especialmente la llevada a cabo por la corporación almeriense del Resucitado a la que pertenece el Señor de la Vida; que ha conseguido que personalidades e instituciones de Almería y otros puntos del territorio, pertenecientes a diferentes ideologías y grupos políticos, se unan por una causa común que no es otra que la promoción del arte y la cultura en beneficio de todos, algo realmente loable que ojalá tuviese continuidad en todos los ámbitos de nuestra sociedad, y que se acopla perfectamente con el espíritu de diversidad y convivencia que siempre hemos defendido desde La Hornacina.

Creemos que todo lo anterior legitima nuestra decisión de seguir adelante y no haber suspendido el premio este año, algo que no solo hubiera sido ilógico al tratarse de una convocatoria online holgadamente cubierta con interesantes trabajos, sino inapropiado en estos momentos complicados que viven muchos profesionales.

 

Valoración de José Antonio Díaz Gómez en este


Noticia de la obra en este


Lista de las obras seleccionadas del año 2020 en este


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