El escultor e imaginero cordobés presenta hoy la primera de sus obras para la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Despojado de sus Vestiduras y María Santísima de la Caridad y del Consuelo, con sede en la Iglesia de San Benito desde 2010. De este proyecto escultórico les informamos el 3 de agosto de 2009.

La imagen en cuestión es la de Jesús Despojado, realizada a tamaño natural (172 cm de altura) para vestir, en madera de cedro real, totalmente anatomizada y policromada a la técnica del óleo. La corona de espinas ha sido tallada sobre la cabeza con pinchos de acacia. Las gotas de sangre son de cristal rojo.

El autor inclina levemente el cuerpo de Jesús hacia delante y abre sus brazos en señal de voluntaria aceptación, siendo la última deshonra que soporta antes de la Crucifixión. La escena figura en el evangelio de Juan: "Los soldados [...] tomaron su manto e hicieron cuatro partes: una para cada soldado, y la túnica" (Jn 19, 23).

El rostro del Varón refleja inmensa dulzura pese al dolor padecido; un dolor tanto físico, que advertimos por las brutales heridas que cubren todo su cuerpo, fruto del látigo, los golpes y la carga del leño, como dolor moral por la humillación, visible en las lágrimas derramadas que se pierden por el cuello.

El cartel de la bendición ha sido realizado por la joven artista gaditana Ana Rey. Se trata de un óleo sobre lienzo, cuyas medidas son 65 x 54 cm, que representa la nueva talla de Romero Zafra con la imponente cúpula de la Clerecía salmantina, antigua sede de la mencionada corporación de penitencia, al fondo.