El 2 de agosto de 1914 Alemania declara la guerra a Francia. Braque y Derain son movilizados y Picasso va a despedirles a la estación de Avignon. En noviembre Braque se incorpora al frente de combate. En el tenso ambiente bélico, el cubismo se identifica con les boches (manera despectiva de llamar a los alemanes). El 11 de mayo del año siguiente Braque cae gravemente herido en el frente de Artois: alcanzado en la cabeza por un fragmento de obús debe sufrir una arriesgada trepanación. Estuvo varios meses ingresado y pasó una larga convalecencia en Sorgues. Como hemos dicho en la anterior entrega, no vuelve a pintar hasta 1917.

En 1919 Braque celebra una exposición en la Galería L'Effort Moderne, propiedad del marchante y editor de arte Léonce Rosenberg (a quien dos años después acusaría violentamente de vender sus pinturas a muy bajo precio), en la que ya aparecen sus naturalezas muertas realizadas con una paleta restringida de verdes, ocres y blancos sobre una capa de negro, que le darían fama internacional.

En los años 20 Braque empieza a interesarse por el mundo griego clásico. De 1931-1932 data el primero de sus héroes y divinidades griegas, tratados en diseños de líneas blancas grabadas en grandes paneles de yeso negro, y los dieciséis grabados para la edición de Vollard de la Teogonía del poeta griego Hesíodo, el más importante de sus libros ilustrados. Desde esta época Braque recurrirá regularmente a la litografía, con tres temas básicos: naturalezas muertas, pájaros y dioses griegos. Entre 1949 y 1956 realiza la famosa serie de los Talleres o Ateliers, seguida más tarde por la de los Pájaros, símbolos de muerte, vida y resurrección.

La antigua antecámara de Enrique II en el Museo del Louvre conserva su techo original, ricamente esculpido en 1557 por el carpintero Scibec de Carpi. Un decorado pintado, titulado Les Oiseaux (Los Pájaros), fue encargado a Braque para adornar los tres compartimentos de este techo. Inaugurado en 1953, justifica el bello epitafio que le dedicó el escritor André Malraux, a la sazón Ministro de Cultura, en las honras fúnebres de Braque celebradas en el Louvre: "es tan legítimo que Braque esté en el Louvre como el Ángel de Reims en su catedral".