DOLOROSAS EN BLANCO Y NEGRO - VILLANUEVA DE LA SERENA
Sergio Cabaco y Jesús Abades
El escultor valenciano Mariano Benlliure Gil realizó una de sus mejores piezas marianas para el municipio pacense de Villanueva de la Serena. La talla, que costó 11.000 pesetas (aunque su propio autor donó el último plazo), fue labrada en el año 1943 y es titular de la Cofradía de Nuestra Señora de los Dolores, cuyos orígenes fundacionales se remontan al año 1669. La Virgen muestra una expresión grave y circunspecta ante la tragedia. Inclina levemente la cabeza hacia la derecha y deja la mirada perdida en el infinito, abstraída en su destino. Sus manos reposan juntas sobre el pecho, enmarcando el corazón atravesado por los siete puñales. Pese a todo, su extraordinaria belleza no queda alterada al ser el suyo un dolor sereno; un dolor, como afirmó el escultor Eduardo Acero sobre Benlliure, alejado del desgarrado lamento de los autores barrocos. Juan Adsuara, compañero de Mariano Benlliure, publicó en los años 40 que su colega era un maestro del realismo escultórico, y en esta creación pasionista también encontramos el detallismo de Benlliure en el modelado, de honda raíz naturalista: los lacios cabellos caen sobre la frente; los labios se contraen para acentuar su aflicción; el cuello, al igual que las facciones, se estiliza sobremanera para idealizar aún más la divinidad, y las manos, esculpidas con pormenorizado afán, parecen tener vida propia sobre el negro luto que impregna su atuendo. Parece ser que el modelo femenino en que Benlliure se inspiró para llevar a cabo esta escultura fue una joven de raza gitana, supuestamente familiar de Joselito el Gallo. Ello se basa en el enorme parecido que tiene la Virgen con una de las integrantes del duelo que aparece en el monumento funerario realizado por el escultor a la memoria del famoso torero sevillano. La Virgen de los Dolores, talla completa revestida con telas naturales, posee capilla propia en la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de Villanueva de la Serena, obra de estilo herreriano que ha sido recientemente rehabilitada para restaurar la torre, sustituir las cubiertas, limpiar sus muros, realizar algunas decoraciones pictóricas y adecentar sus altares. |
FUENTES: HORRILLO, Francisco
José: "La Crónica de
Villanueva de la Serena", en El Periódico, septiembre de 2003.
Anterior Entrega en este |
www.lahornacina.com